Lesiones: La peor pesadilla de la era Mel

Manuel Borrego

 

Desde la incorporación de Pepe Mel al banquillo de la UD Las Palmas las lesiones han condicionado el rendimiento parcial de su plantilla. Medio centenar de incidentes relevantes se han registrado en la actividad del HPS, paralizando varias jornadas o meses la actuación de los futbolistas en el campeonato. Y, entre los distintos casos, llamativo porcentaje de situaciones generadas por fracturas que necesitaron incluso el paso por el quirófano.

 

El entrenador ya ha manifestado en varios momentos su pesar por estas ausencias. “No es normal que tantos futbolistas tengan que pasar por el quirófano en una misma temporada”, matizaba el técnico al valorar públicamente este asunto.

 

En el vigente campeonato la situación parecía ir por un cauce sereno. Incluso a Lugo viajaron los 28 futbolistas habituales en sus planes salvo Sergio Ruiz, que era el único lesionado de importancia hasta hace una semana. Pero la pesadilla vuelve con los casos de Viera, Peñaranda y la incógnita de Pejiño.

 

Sin duda, el paréntesis mayor y más importante de todos estos incidentes lo sufrió el meta Raúl Fernández, que debió esperar desde aquel aciago día frente al Cádiz en 2019 hasta hace apenas unos meses, cuando volvió a la titularidad del once amarillo y “a sentirme otra vez portero de fútbol”, dijo.

 

Casos vividos como los e Drolé, Araujo, Narváez, Benito, Boris Rapaic -desaparecido tras su debut por una lesión-, Aythami, Maykel Mesa, Christian Rivera o el mismo Jonathan Viera … algunos reincidentes y otro, como Cristian Cedrés, que tras su explosivo debut finalmente los incidentes médicos le pasaron factura al no continuar en el equipo.

 

Y ahora que asomaba Las Palmas la cabeza, vuelven las preocupaciones. Hora es de mostrar si es cierto que dos poseer dos jugadores genera la garantía de los reemplazos. Se lo ponen difícil al entrenador.