Verano del 83: El fichaje más audaz de la UD

Se cumplen cuatro décadas de la llegada de Koke Contreras, la estrella chilena que Las Palmas firmó guiándose solo de los informes sobre sus cualidades futbolísticas

Koke Contreras, rodeado de aficionados. En el recuadro de la derecha, Antonio Betancor, secretario técnico de la UD Las Palmas en 1983 (TA)

Manuel Borrego

En este verano de 2023 se cumplen cuatro décadas del último gran descubrimiento extranjero de la UD Las Palmas. Jorge Contreras, considerado como uno de los mejores atacantes internacionales que ha tenido el equipo amarillo. Sin embargo, llegaba a la isla de puntillas. Y lo hacía porque no tenía un nombre de rango en el fútbol mundial y su club de procedencia (CD Palestino) apenas tenía relieve en el concierto sudamericano.

Pero el futbolista chileno iba a convertirse en España en un auténtico crack, cuyo liderazgo y protagonismo en el Estadio Insular llegó hasta el corazón de la afición grancanaria.

Todo comenzó con el tradicional viaje hasta Argentina del entonces secretario técnico del club, Antonio Betancor, que debía encontrar refuerzos para apuntalar la plantilla de un equipo recién caído de la Primera División tras 19 temporadas ininterrumpidas en ella. Con esa misión se desplazó hasta Buenos Aires, donde años antes había logrado la firma de Carnevali, Wolff, Brindisi y Morete, los cuatro grandes internacionales argentinos que han vestido la camiseta de la UD Las Palmas.

La descripción de la sorpresa que causó hace 40 años Koke Contreras la contó a Tinta Amarilla su compañero Javier Campos, jugador zurdo que actuaba como defensa lateral en aquel grupo de jugadores de 1983-84. "Estábamos empezando la pretemporada en Barranco Seco y por la tarde nos reunió el míster, Héctor Núñez, para traer una noticia a los jugadores. Nos dijo: "El club ha fichado a un futbolista que golpea más fuerte el balón con la cabeza que con el pie".

El fichaje de Koke Contreras por la UD Las Palmas podría ser considerado como el más audaz de la historia del club grancanario. Betancor revisó de arriba abajo todos los posibles candidatos argentinos que podrían venir a la isla para unirse a la causa grancanaria. Consultó precios, calidades y cualidades, tanto de Primera como de la segunda categoría en la liga albiceste. Pero no hubo manera de que Las Palmas pudiera acceder a comienzos de los ochenta a cualquiera de las opciones estudiadas.

Entonces, aún en su estancia en Buenos Aires, recibió un informe confidencial sobre un jugador chileno cuyo talento merecía la pena observar. Tenía Contreras 23 años recién cumplidos (3 de julio de 1960). Como el mercado de Argentina estaba imposible, recibió el visto bueno de Jesús García Panasco (secretario general) para viajar hasta Santiago de Chile y observar allí al mencionado Koke. Al otro lado de la Cordillera Andina, la UD Las Palmas podría sorprender y encontrar a ese jugador que buscaba para apuntalar el ataque del equipo.

Pero tampoco tuvo suerte en el intento Betancor porque una huelga de futbolistas impidió que observara in situ a Contreras. De esta forma, guiado por la fidelidad de la información obtenida y con todos los números encajados en sitio, se fraguó la venida del joven Koke. Sería también su primera gran experiencia internacional, una prueba de fuego también para él.

Cuentan que al llegar al Aeropuerto de Gran Canaria, Contreras tuvo una conversación con el propio Antonio Betancor que allí lo conoció. El secretario técnico de la UD Las Palmas quiso saber más sobre el futbolista contratado. "Las Palmas se decidió por Contreras y fichamos sin verle, pero sabíamos que era un jugador excelente", nos admitió años después el propio Betancor.

Desde el primer entrenamiento en Barranco Seco, Héctor Núñez y los jugadores de aquella plantilla de la UD Las Palmas se percataron de que había llegado un futbolista diferencial, que no solo golpeaba bien el balón de cabeza. Los informes de Betancor fueron excelentes. "No puedo decir que fuera el mejor extranjero que ha tenido el equipo, porque para mí estaban por delante Wolf, Brindisi y Morete. Pero sí creo que después de los argentinos Koke lo fue. Para nosotros fue una gran sorpresa comprobar que Contreras era mejor todavía de lo que nos habían dicho".

El seleccionador de Chile en aquellos años, Luis Ibarra, avaló las condiciones de Contreras como jugador creativo, buen lanzador de faltas y cabeceador. "Nadie creía la UD Las Palmas que Koke Contreras fuese a resultar tan bueno como lo fue. No era muy alto, pero saltaba muchísimo y remataba muy bien. No tenía rapidez, pero era muy ágil e inteligente en el terreno de juego. Como lanzador de faltas marcó una época, si bien antes también lo tuvimos con Guedes, Germán, Wolff o Brindisi", añadió Betancor.

Así fue cómo Koke empezó a crear su propia historia en la UD Las Palmas, decorada especialmente con el ascenso a Primera División de 1985. Fue un año de éxito con un grupo de jugadores canarios y dos chilenos (además de Koke Contreras, el atacante Fernando Santis). Koke alcanzaría la internacionalidad absoluta con Chile en el transcurso de sus seis años de militancia en la UD Las Palmas, donde sumó 93 goles en 257 partidos oficiales.

Fue un ídolo de la marea amarilla. Salía a hombros del Estadio Insular, cruzaba la calle Manuel González Martín y subía a casa acompañado por los aficionados que un rato antes habían coreado el ‘Kooooke, Koooke’ en el Estadio Insular. Todo comenzó cuarenta veranos atrás y sin que nadie lo pronosticara.