El espíritu Marco Polo de Diego Parras

El ex jugador de la UD Las Palmas regresa al fútbol tras su aciaga etapa en el Mérida. Y su posible objetivo para la próxima temporada puede ser fuera de España porque "tengo ganas de aventura"

Diego Marrero Paras, con Juan Manuel Rodríguez, este domingo en el Estadio Anexo al Gran Canaria (C. Torres)

Manuel Borrego

La sonrisa vuelve al rostro de Diego Parras (28). “Mi único objetivo ahora es disfrutar todos los días en los entrenamientos, coger la forma, recuperarme física y mentalmente para que en el verano pueda tener opciones de conseguir un buen contrato”. Lo dice convencido, como también advierte a los lectores de Tinta Amarilla que “tengo ganas de aventura”.

Ha querido el destino enviarle un guiño al extremo o lateral grancanario. Este pasado domingo volvió al fútbol en el estadio Anexo, con la camiseta del Arucas CF. Decimos que volvió porque sus últimos meses fueron un calvario personal, encadenando tres lesiones en la etapa emeritense -que ya en sí misma fue otro tipo de aventura-.

“Lo que tengo claro es que no volveré a jugar lesionado”, explica. “Porque al final de todo he sido el perjudicado y he tenido que volver a la isla para recuperarme. Agradezco mucho a mi actual club y al doctor Mena todo el cariño y el esfuerzo que ha volcado en mí. Por eso, cuando jugué otra vez frente a Las Palmas Atlético me sentí de nuevo una persona muy feliz”.

Y tanto. “Estaba en mi ‘redebut’, en mi casa de Las Palmas Atlético, volví a saludar a muchas personas de las que conservo un gran recuerdo, volví a pisar aquel campo y me he levantado un día después sin dolores. Eso es lo que estaba buscando y me da fuerzas para seguir”, precisa Marrero Parras.

Los aficionados de la UD Las Palmas recuerdan a un más joven Parras corriendo la banda hasta la línea de fondo con el equipo filial, participando en el ascenso con Manolo Márquez a Segunda B y, más tarde, incluso debutando con los profesionales amarillos en la Copa. Era etapa de Manolo Jiménez.

De aquella quinta tan valiosa del filial todavía están en la primera plantilla del club los Eric Curbelo, Álex Suárez, Kirian Rodríguez, Benito Ramírez y Fabio González. Entre ellos y Parras se podría relatar más de medio equipo de un filial que marcó una etapa.

“Claro que los sigo a todos”, puntualiza Parras antes de recordarle que mantuvo una sociedad personal con Álex Suárez, porque ambos viajaron de la mano desde Los Olivos hasta la capital. “Quiero decir que, como persona, Álex Suárez sigue siendo el mismo que conocí en el Villa. El mismo; no ha cambiado por más que ha crecido como deportista. Tengo ganas de verlo y encontrarme con él, aunque ya hemos hablado mucho en este tiempo”.

De Suárez valora Parras que “se lo ha ganado por constancia, porque es serio, trabajador, honrado, … Ha insistido, ha creído en sí mismo, para poder llegar ahí. Verlo en Primera División no puede sorprender, porque sé la persona y el deportista que es. Me alegro mucho de su éxito, se lo merece. Es un referente para muchas personas”.

La elección del Arucas no es casual. Porque detrás de la incorporación de Parras está la mano de Jonay Futre, que “fue mi compañero en el Villa. Me llamó y acepté porque tengo mucha confianza en él. Me habló de la seriedad de Juan Germán Jiménez y de Sergio Hernández. Desde el primer momento he recibido todo el apoyo para recuperarme, sin prisas, para poder debutar cuando las condiciones se dieran. Y eso es lo que ha sucedido”.

“¿El Villa?. Pues claro que lo tengo en cuenta. No sé cuándo … Pero es mi equipo para siempre. La situación ahora se ha dado para fichar por el Arucas, porque además estoy cerca de casa. Voy a intentar hacer lo mejor posible durante el resto de la temporada. Porque en el verano quiero estar en las mejores condiciones posibles y seguir mi trayectoria. ¿Dónde?. Aún no lo sé”, apunta.

Y es ahí donde la aventura florece en la piel de Parras. “Sí, tengo ganas incluso de salir fuera del país, de conocer otra cultura a otras gentes. No sé dónde aún; me apetece practicar idiomas, quizá el inglés. Ya veré, pero todo tiene un orden. Primero quiero disfrutar de lo bien que me siento volviendo con el balón”. Su amigo.