La superficie de los Olivos mejora; la del Anexo cae en el olvido

M.B.

Cada vez que se nombra el campo auxiliar del Estadio de Gran Canaria, su Anexo artificial, rescata entre los usuarios de la instalación un suspiro de lástima. "Requerimos un poco de sensibilidad con este campo, que utilizan muchos jugadores de nuestra base y de otros clubes (AD Siete Palmas)", afirma Tonono Rodríguez, director de formación y captación de la UD Las Palmas.

El estadio donde jugaba y se entrenaba (en pretérito) el primer filial de la UD Las Palmas sigue siendo, meses después de la reforma de su superficie, un no aliado del fútbol. La playa de caucho y sus alrededores producen dolor. La forma en que se trabajó el paso de la fibra de coco a la goma reciclada dejó mucho que desear y aún hoy, pasado seis meses desde aquella transformación, los efectos permanecen.

El material, rodeado de goma reciclada, mientras los jugadores de la UD Las Palmas se entrenan en el Anexo (C. Torres)

Los fajos de caucho sobrantes en el Anexo, aún en su sitio de entrega (C. Torres)

Ahí sigue la veintena de fajos de una tonelada de peso, que no tienen uso y que fue el sobrante del material añadido a la superficie. Su cálculo al alza fue extraordinario y no nos imaginamos cómo habría quedado la instalación si ese caucho, que luego fue distribuido de aquella manera, también se incorpora al verde sintético.

Así se distribuyó el caucho en el campo auxiliar de Siete Palmas, en noviembre pasado (C. Torres)

Contrasta todo ello con lo ocurrido esta misma semana a pocos kilómetros, en el también abandonado (municipal) campo de Los Olivos, en Santa Brígida. El club, a través de su insigne directivo Francisco Alemán, captó una colaboración de la empresa Kec que compactó la superficie de juego de la UD Villa de Santa Brígida. Esta era una demanda que la entidad requería desde que la instalación abrió sus puertas. Maquinaria específica para estos trabajos fue empleada para distribuir con mejor criterio las distintas montañas de caucho, que se acumulaban en distintos sectores del campo.

El club satauteño está satisfecho con lo realizado, aportando de nuevo un plus a su labor por el municipio pese a la cero comprensión del gobierno de la villa. Todo por el fútbol, por la cantera de la zona que vive con ilusión el salto ya confirmado a la liguilla de ascenso y la posibilidad añadida de hacerlo como campeón.

El cariño, si no existe, hay que fabricarlo.

Aspecto de Los Olivos durante los trabajos de distribución del caucho, esta misma semana