Tal día como este 16 de junio, en 2005, decidía colgar las botas uno de los capitanes de mayor impacto en la reciente historia de la UD Las Palmas: Paquito Ortiz, que a los 36 años de edad daba por cerrada su ejemplar trayectoria deportiva.

El polivalente jugador procedía del CD Maspalomas y en 1992 se convertía en el primer refuerzo de la UD Las Palmas ya como Sociedad Anónima Deportiva, tras la reconversión obligada de aquella época. 

Paquito tiene en su curriculum de amarillo una trayectoria que inició en Segunda B, escalada posterior a Segunda A (1999) y Primera División (2000), categoría en la que dejó el club en 2001 después de nueve años provechosos y apasionantes. El histórico Raith Rovers escocés y seis meses en el Hamilton fueron los otros dos conjuntos en los que finalmente actuó antes de la gran decisión.

Había llegado al club amarillo como en él es costumbre: sin hacer ruido, para ponerse a las órdenes de su primer entrenador, Álvaro Pérez. Le tocó cubrir el ciclo completo del cuatrienio en Segunda B, hasta la eufórica noche sanjuanera de 1996 con la goleada al Elche en el Martínez Valero.

Actuó como defensa lateral diestro, pero también los técnicos del club le encontraron misiones en el centro del campo. En todas las facetas, Paquito cumplía con regularidad, a veces con mayor brillo que en otras.

Entre sus noches memorables está la del 5 de febrero de 1997, en partido de Copa, anotando el gol de apertura en la remontada frente al Valencia en Mestalla, finalizada con una célebre tanda de penaltis.

También el Elche fue el rival con el que celebró su segundo ascenso, el del regreso en 2000 a la Primera División. En esa suprema categoría debutó en 2000-01, en partido disputado en Los Pajaritos de Soria.

Su hoja de servicios en la UD Las Palmas la completó con 302 encuentros (22 goles) en tres categorías y Copa. Y, además, con su voluntad de ayuda al equipo más tarde fue entrenador durante 4 partidos en una difícil etapa en el tránsito entre Pako Ayestarán y Paco Jémez, en 2018.

20 años después Paquito sigue en la brecha en sus funciones como miembro de la Fundación de la UD Las Palmas, enseñando a quien le escucha el recto y leal caminar de los amarillos.