Opinión

El triunfo en el Bernabéu que no se ha visto

La despedida de los jugadores en el Bernabéu, saludando a los aficionados amarillos en las gradas (UDLP.es)

Manuel Borrego

Lo mejor del Bernabéu, de lo ocurrido este miércoles en la séptima jornada y a la vista del partido que allí se desarrolló, fue el resultado. Y también la respuesta leal y animosa de los aficionados de la UD Las Palmas que acompañaron a los jugadores de García Pimienta ilusionados con vivir lo que nunca antes, desde 1951 en adelante, se ha disfrutado en aquel recinto.

La realidad es que un Real Madrid de perfil bajo pudo obtener un marcador muy lesivo para los intereses del equipo grancanario. Este actual conjunto de Ancelotti nada tiene que ver con aquel por ejemplo del 7-0 de 2001-02, con Zidane, Figo, Morientes, Roberto Carlos, Casillas, Guti, Munitis y compañía en el campo. Pero una gran figura de la noche (Álvaro Valles) evitó un marcador que podría haber horadado en la moral más que en lo real. Y dejar posibles consecuencias en un déficit del golaverage, porque todo en esta Liga cuenta o puede tener sentido. El portero de la UD Las Palmas mostró hechuras de arquero de Champions. Su listón sigue siendo imperceptible aún.

Si no fuera así esta última afirmación, la UD Las Palmas no habría alcanzado la Primera División de forma directa, donde ya Valles hizo una parada memorable en el partido más decisivo. Porque un gol nada más fue la diferencia real que existió en la clasificación con el Levante, en la lucha por la pasada segunda plaza.

Dijo bien García Pimienta que “Las Palmas no fue Las Palmas”. Tampoco su alineación fue la que realmente se podría esperar para ofrecer un bloque más rodado en los partidos oficiales. Pero razones tendrá el técnico, posiblemente asociadas a la disputa de tres partidos en ocho días naturales.

Lo mejor del Bernabéu es que, siendo un resultado negativo, los amarillos pueden pasar página sin una actuación totalmente indecorosa. No lo fue tampoco aquel recordado 7-0, porque los futbolistas de Fernando Vázquez llegaron de manera más abundante y gozaron de ocasiones no cristalizadas. Y que al menos esta vez al final, las sensaciones fueron mejores que las del principio.

Así que habrá que hacer un pase de página inmediato porque los tres puntos ante el Celta son tan valiosos como aquellos que quedaron atrás hace unas horas. La vida continúa, aunque la generación de la Liga 2023-24 no podrá contar a sus nietos de momento cómo fue ese primer triunfo en el Bernabéu que nunca se ha visto.