Vuelve el público a la Liga, pero no en el UD-Zaragoza

B. P.

 

Vuelve el público a los estadios de fútbol, de forma parcial. Pero no a la UD Las Palmas porque la medida excluye a las zonas en fase de alerta epidemiológica 2.

 

El regreso de los aficionados se producirá en las comuniidades, regiones o territorios donde ya esté instalada la fase 1. Ese es el visto bueno que ha ofrecido el Gobierno en el tramo final de los calendarios de Primera, Segunda División y Liga ACB. Son las tres competiciones afectadas por la anterior medida porque público ha habido en competiciones a partir de la Segunda División B.

 

Esta medida permite que los equipos de Valencia o Galicia puedan albergar aficionados de forma parcial en las gradas. Pero no el resto de comunicades, entre ellas Canarias.

 

La noticia de la vuelta parcial de los aficionados la ha ofrecido el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes. Este miércoles se celebró la rutinaria reunión del Consejo Interterritorial de Salud y de ella salió el siguiente mensaje: "Habrá público en los estadios de fútbol y baloncesto en aquellos territorios en fase uno de pandemia, en los que los datos epidemiológicos son mejores. Será con el 30% de afición local y con un tope de 5.000 personas".

 

Carolina Darias, por su parte, explicó "la vuelta del público será posible en los territorios en fase 1 del semáforo (indicador del nivel de incidencia). Tendrá que haber una distancia de 1,5 metros entre las personas en todos los sentidos. Además, la entrada y salida será de manera escalonada y por sectores. No se podrá comer, ni fumar y será exigible una mascarilla FFP2 sin válvula y la toma de temperatura a la entrada".

 

Rodríguez Uribes ha mencionado a cuatro partidos de la Liga que este fin de semana acogerán a aficionados: Valencia - Eibar, Villarreal - Sevilla, Castellón - Ponferradina y Lugo - Mirandés al ser encuentros organizados en zonas que responden a las condiciones expuestas para la vuelta de aficionados. En el UD Las Palmas-Zaragoza, no.

 

Esta noticia no ha sentado bien entre los clubes y la patronal de fútbol profesional.