B.P.

Mingo Oramas fue muy expresivo este lunes al valorar a Tinta Amarilla la actuación del División de Honor juvenil de la UD Las Palmas, que no pudo pasar la ronda de cuartos de final de la Copa de Campeones al perder 0-1 con la Real Sociedad. "Regresamos a la isla superrascados", comentó. "Creemos que este año se había presentado una posibilidad de jugar la final. No estuvimos todo lo bien que yo esperaba en la primera parte, lo admito. Pero en la segunda el equipo fue de menos a más y creamos algunas ocasiones que pudieron servirnos al menos para empatar. Pero ..."

El entrenador del filial amarillo no se explica dos jugadas que pudieron ser determinantes en el desenlace de la contienda. "Con 0-0, José El Chata logró llevarse un balón entre los centrales y marcó. Sin embargo nos sorprendió la decisión del colegiado anulando la jugada, argumentó que había arrebatado el esférico con la mano. Eso no lo vimos desde nuestra posición y el gol no subió al marcador". Y la jugada ulterior sucedió en la acción final del encuentro. "Habíamos creado antes una ocasión de peligro que acabó en corner. Se reanudó el partido y alguien tocó el balón con la mano en el área de la Real. El árbitro fue reclamado por su asistente; pensamos que iba a señalarse penalti pero no lo concedió. No quiero agarrarme al tema arbitral aunque fueron dos jugadas puntuales que no se decantaron de nuestro lado".

Destaca Oramas que "el equipo no estuvo como esperábamos en la primera parte. La Real pudo dominar entonces sin crearnos mucho peligro. Pero nos hicieron un gol a balón parado, tras un corner. El equipo pasó entonces minutos muy difíciles hasta el descanso, porque encajó el golpe. Sin embargo estuvimos mejor en la segunda parte. Creamos hasta cuatro oportunidades que no se resolvieron en el gol del empate. En general, estamos satisfechos por el esfuerzo realizado por los futbolistas. No me gusta destacar de forma individual, pero creo que atrás estuvimos muy sólidos. La pena que nos queda al regresar tan pronto a casa es que volvemos sin la sensación de ser inferiores a la Real y sin haber merecido la derrota. Pero esto funciona así".