M.B.

Lejos de sentirse agobiado o intimidado por los futuros acontecimientos, al presidente de la UD Las Palmas le reconforta la posibilidad de ir ante un juez a causa de la demanda civil que le ha presentado el ex presidente de la entidad, Manuel García Navarro. Porque, según explicó este viernes, al actual máximo responsable del club grancanario le satisface tener la oportunidad de demostrar ante un juez y ante la sociedad grancanaria que sus afirmaciones públicas sobre aquél son demostrables. "Cuando he dicho, por ejemplo, que el dinero del Deportivo de La Coruña -por los traspasos de Momo y Rubén- no entró en la UD Las Palmas, lo he hecho porque tengo pruebas y puedo demostrarlo".

"Ya sabemos todos de lo que va el señor Simplicio" (en alusión a Manuel Simplicio García Navarro, nombre completo del presidente con el que la UD Las Palmas llegó hasta el Juzgado de Lo Mercantil con una deuda de 72 millones de euros). "La diferencia entre él y los que estamos aquí es que él defiende sus intereses personales en contra de la Unión Deportiva Las Palmas y nosotros defendemos el del club y el de todos sus aficionados", manifestó Ramírez.

Los once metros en el juzgado

"Ese ataque personal que me hace es una oportunidad que me brinda para estar delante de un juez con todas las pruebas disponibles sobre todas las acusaciones que he realizado en diferentes ruedas de prensa. He dicho que este señor firmó documentos en calidad de presidente de la UD Las Palmas cuando no lo era y lo podré acreditar; que los pagarés de Momo y Rubén no entraron en la UD Las Palmas, también lo podré acreditar (...) Lo que he dicho sobre él está basado en pruebas. Me pide 180.000 euros por derechos al honor. La denuncia, que no la he leído, está en manos de mis servicios jurídicos. Lo que he dicho de Simplicio lo voy a demostrar ante Su Señoría", recalcó.

"Es una pena que este señor presidiera el club (...) Llevamos diez años en noviembre próximo pagándole a sus jugadores, a sus proveedores, a la Seguridad Social, poniendo al día a la entidad... Nosotros llevamos diez años pagando al día sin ninguna reclamación de nadie, sin denuncias por impago a jugadores. Eso ocurre desde que él no está en el club y sí desde que está el consejo que yo presido. Por lo tanto los hechos hablan por sí solos. A él le molestará que el club va como va; con beneficios prácticamente todos los años".

Recordó Ramírez que las deudas de aquellos años han mermado la capacidad económica de la actual gestión pero "hemos sido capaces de pagar deudas y mantener al club en el fútbol profesional (...) Y estamos un papel bastante digno. Trabajamos muchísimo por llevar al club a la Primera División, que nuestros aficionados lo merecen".

"Estamos para servir a la UD Las Palmas"

"Nosotros estamos aquí para servir a la UD Las Palmas, no para servirnos de la UD Las Palmas. Eso no lo puede decir nadie", recalcó el presidente. "No quiero ser drástico ni dramático. Pero que nadie dude que él pone en peligro la continuidad (supervivencia) del club (...) Si a la UD Las Palmas le condenan a pagar la deuda que él reclama, automáticamente descenderíamos a la Segunda B" remarcó Ramírez tras poner el ejemplo del caso Guadalajara y su descenso administrativo.

"Su reclamación es curiosa: entregó el club con 72 millones de deuda y tiene el honor del ser el primer presidente que un juzgado inhabilita o aparta de la gestión de un club", añadiría. "Lo que pretende García Navarro es que esto vuelva a lo anterior -al concurso de acreedores- donde él era accionista mayoritario", sentenció. "Sin embargo, tenemos que seguir trabajando para que el club no vuelva a caer en manos de este señor".