
El defensa central se ausenta de cualquier debate sobre su renovación y centra su energía en mantener la reacción del equipo tras el memorable triunfo de Gijón
T.A.
Deivid, en su segundo año de amarillo tras pisar la Primera División con el Sevilla, vuelve a marcar las pautas de la pasada temporada. Junto a Barbosa copa la totalidad de los minutos en los once encuentros de la vigente Liga. Y su papel sigue creciendo en el equipo. Por eso, despreocupado de acontecimientos futuros, admitió este miércoles que "me siento importante. Me lo hacen sentir mis compañeros y el entrenador. Dentro del campo siempre he mandado y aquí me siento muy querido. No puedo pedir más".
El defensa central grancanario es intocable en las combinaciones titulares de la UD. Observa el despegue de Las Palmas en la clasificación tras la victoria en El Molinón. "Empezamos con dudas en el entorno, desde dentro no las teníamos. Hemos ido formando el equipo poco a poco y a día de hoy nos acercamos a nuestros objetivos. Estamos metidos en zona de promoción, pero yendo a más. Seguimos creciendo jornada a jornada, ganando además en un campo que es el más complicado de la Segunda División, jugando bien incluso", matiza.
"No es momento de hablar de renovación"
"Estoy contentísimo a nivel personal. Jugué las once jornadas, lo hice sin molestias, no me he perdido ningún entrenamiento ... a nivel individual no puedo pedir más". Vive con tranquilidad el momento y saborea el presente sin pensar más allá que en las próximas horas. "No es tiempo de hablar de mi renovación. Es el momento de ganar partidos, de meternos en liguilla. Estoy tranquilo, tengo la confianza total de todos los miembros del club. No va a haber problema de ningún tipo. Estoy muy contento en casa. Decidí venir en su momento y estoy satisfecho. ¡Qué más se puede pedir!. Conmigo no habrá problema para renovar", puntualizó.
En el campo de batalla, confiesa Deivid que "ningún equipo jugará como lo hizo el Sporting. Fue un partido de Primera División, con dos equipos abiertos, con vocación de ataque de los dos. Tenemos que ganarles a todos si queremos conseguir el objetivo" (...) "En nuestro estadio vienen a buscar el empate la mayoría. Optan por jugar al contragolpe y meterse atrás. Debemos tener paciencia para ganar a cualquier rival. Es más fácil defender que atacar. Los que se encierran aquí nos cuestan abrirlos. Sin embargo, cuando quitamos el balón creamos muchas ocasiones"
"Uno de mis peores partidos"
Le motiva encadenar la segunda victoria consecutiva, porque además viene el Alcorcón. "El año pasado perdimos los dos encuentros con ellos. No dimos aquí una buena imagen y fue uno de los peores partidos de mi carrera. Queremos ganar, como pasó con el Girona", reconoció. "No hay tanta diferencia entre los de arriba y los de abajo. Todos se roban puntos, cualquiera puede ganar a cualquiera. El que sea capaz de encadenar varias victorias estará arriba. Si nosotros lo logramos, será muy difícil bajarnos de esa zona".
Jugar en la UD Las Palmas implica saber qué significado tiene: "La presión existe cada jornada con esta camiseta. Una vez te la pones tienes que ganar hasta los amistosos. Eso lo vivimos jornada tras jornada". Así que "todo entrenador quiere que no existan lesionados y le gustaría tener el problema que tiene Lobera para hacer las convocatorias. Todos han venido a sumar; los canteranos también. El míster tiene que estar contento y, como él dijo, van a haber golpes para entrar en la convocatoria".
"Había goleadores"
Le supo a Deivid que Maky Chrisantus reivindicara su protagonismo en El Molinón, con un hat-trick que pasa a la leyenda histórica del equipo. "Sabíamos que teníamos goleadores. Otra cosa es que no lográbamos marcar. No vamos a descubrir a Maky ... hay que tener tranquilidad, respetar al futbolista y sus momentos. Hay goleadores suficientes en nuestro equipo como para ganar los partidos".