M.B.

Masoud llegó, se hizo las pruebas médicas, firmó contrato, viajó con el equipo hasta Soria y no ha parado. Debutó en Sabadell, marcó a los 14 minutos, regresó el miércoles, durmió "muchísimo", almorzó en un restaurante junto al hotel y volvió a entrenarse en Barranco Seco este jueves. Pero el iraní, con tanto ajetreo, está feliz. Ha encontrado en la UD Las Palmas "lo que estaba buscando. Todo lo que me dijeron sobre el club y el equipo se está cumpliendo. La ciudad todavía no la he visto, no tengo una opinión".

El refuerzo invernal cree que "mi debut ha salido bien. Estoy muy cansado, pero empezar con gol en el primer partido da fuerzas. Ahora que he regresado y he visto un poco el proyecto, sé que puedo dar mucho más" en su rendimiento.

El tiempo de inactividad con el Osasuna la pasada temporada le ha hecho reflexionar. Antes de salir a jugar en Sabadell pensó que "todo el mundo tiene un concepto sobre mis goles: siempre dicen que son golazos o muy bonitos. Este año voy a ser más ofensivo, quiero tener una cifra de tantos importante. Es más valioso meter más que uno al año. Hay delanteros que meten hasta treinta goles en una temporada y muchos de ellos son como el que marqué en Sabadell" (tras estar atento a un rechace). "Insisto, en mi idea está marcar muchos y tener mucha presencia en el área".

Explicó cómo fue la jugada en la que adivinó el despeje del zaguero arlequinado para introducir el 0-1. Confiesa Masoud que "mi puesto favorito es la mediapunta, que es donde puedo aportar más. Pero ahora llega el crack del equipo, Juan Carlos Valerón, y hemos de jugar donde se me asigne. En Osasuna lo hice por la izquierda, por la derecha y un año como delantero. Pero la idea sobre mi participación en el equipo está clara".

Para el mago persa, una vez ha observado las primeras escenas de la Segunda División, existe una diferencia en relación a la Liga de las Estrellas: "Hablo por los partidos más recientes, de Soria y Sabadell. En Segunda también los equipos quieren tocar el balón, intentan jugar al fútbol en corto. Esa es una tendencia general. Pero he visto que existen más espacios para aprovechar en ataque en relación a la Primera División".

La confianza y el tiqui-taca

Una de las razones por las que Masoud se convenció de que Las Palmas era su nuevo destino profesional fue, precisamente, el buen gusto futbolístico de los jugadores amarillos. Esa teoría la ha ido contrastando con el roce profesional con sus nuevos compañeros. "Podemos mejorar todos en nuestro juego, eso nos lo va a dar los partidos y el ritmo de la competición. Para alcanzar el juego de tiqui-taca el equipo necesita tener mucha confianza en su fútbol. Eso es lo que trataremos de encontrar. Ganando se adquiere más confianza en el campo".

En el terreno personal, reconoce que su estreno de amarillo (negro de la segunda equipación) se vio condicionado en la segunda parte porque "me encontré físicamente cansado. Habíamos hablado con el entrenador lo que se buscaba en el encuentro. Pero he regresado con el convencimiento de que puedo dar mucho más".

Se podría esperar que Masoud, al igual que el resto de refuerzos más recientes Apoño y Aranda, pudiese tener continuidad el domingo frente al Real Jaén, en la que sería su presentación ante la afición de la UD Las Palmas. Advierte el iraní que "podría parecer un partido fácil, pero el Jaén le ha ganado al Girona, que es uno de los equipos más en forma de la división, y eso anuncia la igualdad del campeonato. Sin embargo, sin ánimo de crear presión, necesitamos ganar el partido sí o sí. En ello estamos. Tenemos que sacar muchos puntos en la primera vuelta, en la segunda será mucho más difícil".