
B. Pérez
La historia de las personas tiene estas cosas. El viaje deportivo de Alberto Moleiro está todavía en sus inicios, aunque todo tiene un anecdotario cargado de argumentos curiosos.
El ahora centrocampista del Villarreal comenzó a dar patadas al balón en Gran Canaria, cuando su padre Alfredo estuvo destinado por motivos profesionales. Su primer equipo en la isla vestía el azul celeste y negro de la AD Siete Palmas, convirtiéndose Alberto en el primer jugador de esta joven cantera que ha llegado al fútbol profesional.

Desarrolló una etapa determinante en las filas del Sobradillo antes de que los captadores de filiales de la UD Las Palmas se fijaran en él y lo devolvieran a Gran Canaria como nuevo valor de cantera. La Casa Amarilla fue su residencia desde 2019, con licencia juvenil y antes de asomar la impactante etapa de la pandemia del Covid.
Cuando el fútbol se reanudó, sus padres (Alfredo y Mari Paz) viajaban a Gran Canaria para poder estar con él y ver los partidos del juvenil amarillo desde el exterior del Juan Guedes, porque era una época en la que no había permiso para acceder el público a los estadios. Con una escalera, los progenitores de Alberto escalaban y se sentaban en el muro perimetral de Tamaraceite, sin abandonar las reglamentarias mascarillas del momento.

Siguieron aplaudiendo a su hijo cuando siguió su trayectoria en filiales, llamado por Juan Manuel Rodríguez para varias intervenciones con Las Palmas Atlético. Ya entonces los pronósticos sobre su futuro eran muy alentadores porque no dejaba de crecer su juego y personalidad en los terrenos.
Todo lo demás de Moleiro lo conoce bien el público del Estadio de Gran Canaria. Sus 147 encuentros como profesional desde que Mel le hizo debutar el 15 de agosto de 2021, el primer gol al Ibiza para convertirse en el cuarto realizador más joven en la historia del club (con 17 años, 11 meses y 10 días), sus lágrimas tras el ascenso a Primera en 2023, el estreno en la máxima en octubre de ese año tras esperar 10 jornadas por lesión, la llamada a la selecciones inferiores de España desde septiembre de 2021, … el duro golpe del descenso y sus lágrimas en solitario observando el Estadio de Gran Canaria.
Ha sido un viaje intenso, vibrante, … que pasa del amarillo al groguet, teñido así para el abordaje en Europa, siguiente estación.