
Se quejó Michel Sánchez sobre el gol anulado al Girona, al no apreciar “absolutamente nada” en los instantes previos al disparo de Van de Beek.
La moviola del partido, en cambio, descubre dos situaciones dignas de VAR que llevaron a la anulación del tanto a los 5 minutos.

Las Palmas reclamó que el balón había abandonado el terreno de juego antes de que se generase la acción reclamada por el técnico del equipo catalán.

El colegiado no llegó a analizar la protesta de los amarillos. Y, más tarde, Álex Suárez es objeto de un codazo posiblemente involuntario. Pero el golpe en el rostro le hace caer fulminado por el dolor y es precisamente ese espacio por donde el disparo del jugador visitante pasa para irse a las redes de Cillessen.
Fue un partido con mucho contacto e interrupciones. Como la del golpe en el rostro de David López a Fabio Silva cuando el portugués abordaba los últimos metros para un remate. Pero Las Palmas siguió a lo suyo y no ‘lloró’ por la decisión del colegiado. Hizo valer el sigan, sigan …