Ndeye Thiama Kamara (28 años y 1,93 metros) regresa a su club de formación, el Spar Gran Canaria, tras una dilatada trayectoria a caballo entre España y Francia, en la que la interior senegalesa se ha seguido curtiendo, pero siempre sobre la base de su formación en la cantera inagotable de las Islas Canarias.

Así lo ha anunciado este miércoles el club isleño. Resalta en su nota oficial que tras jugar dos temporadas en la máxima categoría del baloncesto nacional en el propio Spar Gran Canaria, Thiama arrancó un largo recorrido por la categoría de plata que la llevó a defender los colores del Batalyams Extremadura, Valencia Basket -formando parte del equipo que ascendió a la LF Endesa-, Picken Clareo, GDKO Ibaizabal y RACA Granada, antes de cambiar de aires y probar fortuna en el país vecino, Francia, donde ha jugado durante el último tramo de su trayectoria profesional en el Sainte Savine Basket, CJS Geispolsheim y finalmente, en las Pink Ladies del Le Roannais Basket Féminin.

Su versatilidad y altura la permiten actuar en las dos posiciones interiores, aunque en principio su rol está predestinado a jugar de ala-pívot. Con su regreso el Spar Gran Canaria se asegura la presencia de una jugadora de equipo, muy física y con una ética de trabajo incansable que se forjó en su etapa formativa en la cantera isleña.

“Begoña Santana y Domingo Díaz fueron mucho más que entrenadores para mí”, comenta la jugada. “Me acogieron, me guiaron y me apoyaron como si fuera un miembro de su familia. Begoña, en particular, siempre estuvo ahí, cuidándonos con un cariño y una amabilidad excepcionales. Su dedicación al Club Baloncesto Islas Canarias y a sus jóvenes jugadoras es admirable. Han dedicado su vida a formar no solo deportistas, sino también a personas responsables y apasionadas. Volver a este club es como volver a casa, reencontrarme con personas que han influido profundamente en mi vida. Quiero agradecerles de todo corazón todo lo que han hecho por mí y por tantos otros. Su influencia va mucho más allá del deporte, y me siento honrada de poder continuar mi camino bajo su guía”.

“A lo largo de las temporadas he trabajado mucho en mi técnica, en mi visión del juego y en mi condición física. Cada experiencia, ya sea en partidos o en entrenamientos, me ha permitido madurar como jugadora y como persona”, añadió. “Soy una jugadora decidida, siempre dispuesta a dar lo mejor de mí por el equipo. Me gusta asumir la responsabilidad en la cancha, pero también sé escuchar y aprender de los demás. Mi objetivo siempre es contribuir positivamente, ya sea en ataque o en defensa”.