Herzog-Mármol, un dúo en la historia de la UD

Los centrales utilizados ante el Villarreal por García Pimienta son los más jóvenes en Primera desde la formación del tándem Tonono-Castellano en 1964-65

Manuel Borrego

 

Sucedió este sábado en el Estadio de Gran Canaria. Juanma Herzog (19 años y 8 meses) y Mika Mármol (22 años, 6 meses y 12 días) formaron el segundo dúo de centrales más joven en afrontar un partido de Primera División con la UD Las Palmas.

 

Ese dato habla por sí solo del grado de dificultad del proyecto grancanario esta temporada, que tiene como condimento el que los cinco jugadores que actuaron en retaguardia frente al Villarreal son debutantes en la máxima categoría. Porque a los mencionados hay que añadir el portero Valles (26) y los laterales Suárez (30) y Sergi Cardona (24); cuatro de ellos son brotes de la cadena de filiales del club grancanario.

 

El caso Herzog-Mármol es digno de análisis, tratándose también del primer partido del defensa tinerfeño en la máxima categoría. Lo hacían frente a un tándem ofensivo que había anotado 14 goles en el campeonato antes de llegar a Gran Canaria: Gerard, 9 y Morales, 5; uniéndose luego el noruego Sorloth, 6.

 

Esa es la apuesta valiente del club amarillo y de su actual entrenador, que la ejecuta. Habría que viajar muy lejos en el tiempo para localizar la pareja de centrales más jóvenes de la UD Las Palmas en un partido de máxima categoría. Es el partido de inauguración de la temporada 1964-65, tras el tercer ascenso a Primera. El 19 de septiembre de 1964 jugaron juntos por primera vez Tonono Afonso (tenía 21 años y 17 días) y Paco Castellano (19 años, 10 meses y 25 días). En aquella jornada victoriosa (2-1) frente al FC Barcelona sumaron entre ambos 40 años, 11 meses y 18 días.

La suma de Herzog-Mármol en el partido frente al Villarreal con 42 años, 2 meses y 12 días. Habría que añadir en el caso de Tonono y Paco que el choque frente al FC Barcelona era el estreno de ambos dentro de la Primera División. Y tan perfecta combinación hicieron con el antiguo estilo de duetos defensivos (Tonono libre y Castellano marcador) que prolongaron su hoja de servicios en el club en más de 400 partidos cada uno, la mayoría de ellos juntos en el terreno de juego. E, incluso, en la selección española.

 

Por cierto que Tonono y Paco llegaron a jugar juntos al completo dos temporadas, entre 1965 a 1967, aún militando ambos con edades no superiores a los 24 años.

 

No es nada fácil tomar una decisión como la que en su día adoptó Vicente Dauder o ahora lo ejecuta García Pimienta. Y se demuestra porque la mayoría de los zagueros centrales que han actuado en la UD Las Palmas en estas condiciones han sido futbolistas expertos, muy curtidos en una competición donde están los mejores delanteros del país y posiblemente de Europa.

 

Sirva como otra referencia de dúo sub'23 de centrales, aunque con suma mayor que la actual, la ofrecida por Germán Dévora en Pamplona con Sergio Marrero (23) y Juanito Rodríguez (22). También el resultado fue 0-1 frente a Osasuna en la temporada 1985-86. Esa decisión se produjo tras el relevo técnico de Pepe Alzate y en el tránsito de la llegada de José Manuel León, otro amante de jugadores jóvenes y bañados en Las Palmas Atlético. El bloque defensivo que ganó en El Sadar estuvo compuesto por Pérez, Mayé, Sergio, Juanito y Javi Campos.

 

Desde entonces no se había producido en Primera una situación tan significativa como la interpretada por Herzog-Mármol. Entre ambos sumaban 14.930 días vida, 485 más que Tonono-Castellano.

 

En las campañas del nuevo milenio en Primera, la UD Las Palmas ha utilizado a pocos jugadores sub23 con perfil de defensas centrales. Aunque sí fueron jugadores muy significados en el equipo: El brasileño Álvaro Maior (23) debutante en 2000-01 y el uruguayo Mauricio Lemos (20) en 2015-16.

 

Sin embargo, difícil será de batir el dato global en la Liga Profesional de juventud defensiva del 9 de septiembre de 1984, en Segunda División, cuando Roque Olsen integró una retaguardia con el portero Carmelo Trujillo (19), Pepote (18), Sergio Marrero (22), Juan Román (23) y Roberto Rodríguez (22). Es una afirmación con truco porque ese día frente al Cartagena (2-1) lo disputaron los miembros del filial y sub23 por huelga de profesional del fútbol español.