"No voy a permitir que el vestuario baje los brazos"

Jémez recuerda a Sport que "cuando llegué éramos ultimísimos", pero "aún reconozco que no estoy contento del todo"

Paco Jémez ofreció este viernes unas declaraciones al Diario Sport de Barcelona, antes del partido de la UD Las Palmas frente al FC Barcelona. El técnico amplió algunas valoraciones sobre la actualidad de la plantilla amarilla para decir, entre otras cosas, que "quien no quiera ver nuestra mejora, que no la vea".

Descartó la posibilidad de fichar a Nasri y también la de Trashorras, jugadores en paro. "nos lo planteamos, pero no pudo ser. Por mí, lo hubiera traído pero llevaba tiempo sin poder competir. Quedan pocas jornadas y necesitamos gente con ritmo de competición. Hubiera sido un placer, porque sé que es un tío que se cuida y es un gran profesional, pero ante la falta de partidos, decidimos que lo mejor era seguir con lo que tenemos", dijo.

Sobre el ambiente que detecta en la isla en su eta dijo que "lo que piense la gente me da un poco igual: lo que no voy a permitir es que el vestuario baje los brazos. Hemos pasado de estar últimos y hundidos en la miseria a estar a un punto de la salvación. Hemos recortado siete u ocho puntos al Levante y otros tantos al Deportivo. El que no quiera ver la mejoría, que no la vea, aunque tengo que reconocer que no estoy contento del todo. Ahora nadie se da cuenta, pero cuando llegué éramos ultimísimos".

Sobre la valoración exterior como técnico temerario también se significó: "Eso me da igual. Tengo muy claro lo que quiero hacer: me hice entrenador para ver jugar bien a mis equipos, para transmitir algo y emocionar a la gente, y que todo eso valga para ganar partidos. Me gusta ganar de una determinada manera y no pienso si eso me penaliza o me ayuda (...) Cuando eres entrenador de equipos modestos y humildes, sufres más que disfrutas. Supongo que en los equipos grandes, los entrenadores disfrutan más, sobre todo si al descanso ya ganas 4-0. Así el partido pasa mucho mejor, supongo. Pero el destino de los entrenadores de los equipos pequeños es sufrir".

Sobre el próximo rival de los amarillos recordó que "siempre me gusta. Nunca me decepciona. Y me vas a disculpar, pero quien diga que se aburre viendo al Barça es que tiene otros intereses ocultos por ahí.... Es un equipo que ha tenido una serie de cambios, pero que siempre juega de la misma manera. Yo nunca me aburro viendo al Barça". Sobre Valvere se alegró "mucho por él porque es un gran profesional. Ahora tiene la oportunidad de ganar títulos, de entrenar a un grande y de ser mejor entrenador aún".

Pero también habló sobre su candidatura como entrenador futuro del Barcelona: "Hay que estar un poco loco para plantear eso, pero como este mundo está loco de por sí, tampoco me extrañaría tanto. Todo es posible, ¿no?". Señaló a "Txetxu Rojo" como entrenador que le marcó porque "tuve una relación buenísima, pero si tuviera que quedarme con alguien, quizá Camacho, que me hizo debutar en Primera y me llevó a la selección. Es el entrenador cuyas decisiones más me han marcado. Pero siempre he intentado aprender de la gente que trabaja conmigo. De unos puedo tener mejor recuerdo que de otros, pero estoy agradecido a todos".