La Liga de Segunda División alza el telón este domingo en el Estadio de Gran Canaria, con la recepción de la UD Las Palmas al Andorra. Los técnicos de ambos conjuntos, tanto García Fernández como Ibai Gómez, han pronosticado que se verá un buen espectáculo en el recinto isleño porque “ambos tenemos la misma idea de juego”.

Como propuesta de espectáculo la teoría es buena. Pero el encuentro presenta más atractivos, especialmente para el equipo local. No sería extraño un puñado de debuts en el proyecto de los amarillos. Como la presencia de Sergio Barcia en el once como defensa central, la aparición de Cristian Gutiérrez en el costado izquierdo, la ubicación de avanzado en ataque de Jeremía Recoba, la contribución del incansable panameño Cedeño, … o la reivindicación de un Iván Gil que ha sido motor en la pretemporada del juego amarillo.

Las Palmas busca una victoria y deja buen sabor, para quitar de los labios de sus aficionados las amarguras más recientes de la pasada Liga. Porque el dato no pasa inadvertido: La última victoria como local se remonta al 19 de abril (frente al Atlético) y fue la única de todos los partidos disputados en Gran Canaria durante 2025. Ahí es nada.

El Estadio se ha preparado para estar también en disposición de ayudar a los futbolistas en esa propuesta de fútbol a ras de suelo. Cuando ruede el balón todo ello se comprobará.

La Liga ya está en marcha. Es el principio de algo que tiene buena pinta, pero que debe cristalizar en hecho.