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"La diferencia entre Las Palmas B y C solo es una letra"

Hiromi González se estrenó en Tercera RFEF en un año en el que ha comprobado que por fin "brotó mi fútbol". Sueña con ser futbolista pero tiene el defecto de "poder quedarme dormido" como espectador

Manuel Borrego

Fotos: C. Torres

 

Hiromi González Rodríguez (23 de febrero de 2003) estaba empezando a corretear en la guardería cuando la UD Las Palmas tuvo en sus filas al único jugador japonés de su historia: Kenji Fukuda (2007-08). Además de un nombre de aquel país tan lejano, el extremo grancanario ya comparte con Fukuda la singularidad del trotamundos, porque el delantero profesional lo fue en diversos equipos en los que actuó: 13.

 

El joven Hiromi nos hace una relación de hasta 7 equipos en los que ha militado hasta enfundarse la camiseta amarilla, con la que ahora sueña. “A ver: UD Telde, Unión Marina, Longueras, Huracán, Atlético Gran Canaria, Acodetti y Puerto Las Palmas. A la Unión Deportiva llegué en División de Honor juvenil. Y no me dejo ninguno atrás”.

 

Este pasado fin de semana, Hiromi hizo su aparición como titular en un partido de Tercera RFEF. Fue en Villa Isabel, ante la UD Ibarra, en una jornada con victoria 1-2 de Las Palmas Atlético. Explica a los lectores de Tinta Amarilla que su fútbol ha brotado por fin, aplicando un estilo de extremo a la antigua usanza. Y agradece que el nivel encontrado en Las Palmas C sea tan alto, permitiéndole llegar al siguiente escalón sin notar el salto. “La diferencia entre Las Palmas B y C solo es una letra”, afirma.

 

La alegría futbolística de Hiromi también se refleja en su personalidad: risueño, dicharachero y extrovertido. Son valores que agradecerá el espectador que acuda a ver su juego. Algo que él no haría: “No veo partidos de fútbol en general. Puedo quedarme dormido”, afirma.

 

Así nos dibuja su aún joven trayectoria futbolística:

Con permiso nipón

 

“¿Por qué Hiromi?. Mi padre tuvo esa idea. Ocurrió un día jugando ‘al Fifa’ con sus amigos hace un montón de años. Utilizó como equipo a Japón (la selección) y el narrador del partido nombró a Hiromi (posiblemente el internacional Hiromi Kojima). Ese nombre le gustó y cuando nací mis padres decidieron que fuera el mío”

 

“Pero había un problema. Tuvieron que desplazarse hasta el Consulado de Japón en Gran Canaria, que estaba en Anfi en aquel momento, para obtener una autorización con el fin de utilizar el nombre. Eso me contaron. Así que no fue tan sencillo. E Hiromi soy como futbolista”

Brotó mi fútbol

 

“En el fútbol soy más sencillo. Lo mío es directo. He de confesar que esta temporada me están saliendo las cosas como esperaba. Tengo que agradecer muchísimo la confianza que han tenido en mí los técnicos y el club. Con anterioridad no lograba sacar todo mi juego, aunque para mí este tiempo no ha sido un desperdicio porque he aprendido muchísimo. Pero ahora salen en los partidos mis jugadas; echo también la culpa a mis compañeros, que son buenísimos. En la UD Las Palmas hay una calidad tremenda y eso se refleja en cada uno de los jugadores de filiales. El nivel que hay en la cantera no lo he visto en otros clubes de Canarias”

 

“Sí, ha brotado el verdadero Hiromi. Este año me siento más suelto, mis jugadas están produciendo para el equipo. Mi cabeza ahora está centrada en el fútbol; porque aspiro a ser profesional, como todos en esta casa”

Tengo un defecto

 

“Tengo un defecto. No soy fanático a la hora de sentarme a ver fútbol. Es que prefiero desarrollarlo en los campos de juego. Por eso no soy buen espectador. Aunque hay jugadores que conozco bien porque son de los míos. Nico Williams, por ejemplo, me gusta más que Iñaki”

 

“También puedo explicar que mi abuelo es del Betis, mi padre del Barça y yo este año fui al tour por el Bernabéu. No soy del Madrid, pero me compré una blusa del equipo. Así que hay un lío en mi familia sobre gustos” (…) “A mí no me apasiona un Madrid-Barça, por ejemplo. Y si me siento a verlo, hasta me puede aburrir. Yo quiero jugarlo, no verlo. Soy capaz de quedarme dormido viendo un partido o una película”

Encarar sin bicicletas

 

“Yo soy un jugador al que le gusta encarar al defensa con un control y velocidad. No me gustan las bicicletas ni los caños, aunque a veces me salen casi porque me veo obligado a hacerlo”

 

Asistencias infravaloradas

 

“Este año llevo bastantes asistencias. Cuando abordo una jugada hacia el área sé que el delantero tiene como inicial opción acudir al primer palo. Y si coge el pase, el gol entra. No tengo que hacer nada más. Sé que es más difícil hacer goles, porque lo he podido comprobar personalmente. En una jugada hay quizá ‘mil pases’ y no resulta extraño que el remate se malogre. Pero en el fútbol actual las asistencias están infravaloradas con respecto al gol. En la foto sale siempre el goleador, pero la jugada y el pase pudo ser lo que le permitió. En cualquier caso, me gusta tanto marcar como dar ese último servicio. Me he dado cuenta de que este año he dado bastantes asistencias y el elogio es para el que marcó. Esto es así, de toda la vida”

 

Oportunidad a los atacantes

 

“Escuché muchas veces que en la UD Las Palmas falta un jugador de banda. Esa es una barrera que debemos derribar. Hay que dar ese paso también a los extremos de la cantera, porque los atacantes son buenos en los filiales. Tan buenos como los defensas que debutan”

Salah o Mbappé

 

“Mis gustos futbolísticos van más por el estilo de Salah, un jugador que se cuela por dentro y suelta el balón ‘a lo Messi’ con la zurda. ¿Mbappé?. Corre si le tiran un balón. Es un gran jugador, sin duda. Pero yo creo que tiene mucho marketing. Prefiero a jugadores como Juan Carlos Valerón”

 

La diferencia entre el B y el C

 

“Las Palmas C o Las Palmas Atlético: donde esté quiero rendir y ser útil; dar lo mejor de ti. Igual que si estiman que me necesitan arriba (UD). El nivel del C es muy bueno. Por eso los jugadores llegan al siguiente nivel casi sin notarlo. Quizá fuera de filiales podrían pensar que hay una diferencia de calidad entre las plantillas del B y el C. Pero la realidad es que la diferencia es una letra, nada más. Todos mis compañeros están preparados para jugar en Las Palmas Atlético cuando lo estimen conveniente y lo harán perfectamente. De hecho, lo estamos haciendo”

 

Los tollos del Ibarra

 

“Me gustó la experiencia con Las Palmas Atlético. Esta gente tiene muchísima calidad. En Tercera los partidos son más duros, más físicos que la Preferente. Lo noté personalmente: me recibieron con un par de tollos (golpes). Pero, nada: Soy fuerte y tengo un buen cuello”

 

La peluquería

 

“Si no hubiese sido futbolista … lo tengo claro: Soy peluquero, mi segundo ‘trabajo’. Por las tardes voy a cortar el pelo alguna vez a la Casa Amarilla. Y soy bueno, ¡eh!. A tomarles el pelo también (jeje). Suelo cobrar 10 eurillos, pero si es una buena pelada … veinte (jeje)”

El factor suerte

 

“Cada año que pasa ves que el fútbol no es fácil para nadie y que el nivel de los rivales demuestra esa dificultad. Y en el deporte también cuenta la suerte, porque hay gente de mucho nivel que no la tuvo y nunca llegó a su destino. O simplemente afrontar una lesión grave, que eso ya puede condicionar. Pero me veo que puedo llegar. Tengo que esforzarme, seguir centrado, exigirme, … y tener esa suerte de la que hablo. Y de esta manera disfrutar como estoy haciendo ahora”

 

Una recomendación

 

“¿El mejor jugador que estuvo a mi lado?. Podría nombrar a muchos, pero sé que me faltan muchos por conocer. Pero ahora mismo me acuerdo de un compañero, delantero del U. Viera: Andrés Rivero. Fue quien nos marcó en el Alfonso Silva. Lo conozco bien y sé que es un crack en este deporte. Es un jugador que merece una oportunidad en Las Palmas para demostrar su valía. Eso como mínimo”