Ricardo Pereira

"El aficionado del Gran Canaria no volverá a pasar frío ni se mojará"

El arquitecto del IID confirma que la instalación "con o sin Mundial" pasará a estar en la vanguardia de los recintos españoles de fútbol

Manuel Borrego

 

Ricardo Pereira, jefe del servicio de Arquitectura del Instituto Insular De Deportes, es la persona sobre la que está girando el proyecto de reconstrucción o renovación del Estadio de Gran Canaria. El presupuesto total de las acciones previstas para la candidatura isleña de la Copa del Mundo 2030 rondará los 79 millones de euros, en gran medida destinado a la reforma de la instalación que sería escaparate del fútbol de Canarias.

 

Pereira garantizó que tras la obra “el aficionado no volverá a pasar frío ni se mojará” en el Estadio donde juega la UD Las Palmas. “Por supuesto, yo mismo soy aficionado y lo sé. Entiendo la preocupación. Esto ya no va a suceder”.

 

Esta actuación no tiene como sentido “hacerse para 20 años” de uso de la instalación. Sino “para 50, 100 o más”. Aunque “el objetivo principal de la obra es terminar la instalación, que a día de hoy no se ha acabado”, expresa al valorar su labor al frente del proyecto. Pereira ofrece algunos datos relevantes sobre las actuaciones, que ya habrían comenzado con el levantamiento del pavimiento que está bajo la grada de Tribuna.

 

“No existen desafíos técnicos muy importantes en el Estadio de Gran Canaria. La adaptación es perfectamente realizable con el proyecto que hemos presentado” afirma. “Probablemente lo más complicado sea la (nueva) Grada Naciente. Pero no dudo que se afrontará el reto” con éxito.

 

“La remodelación del Gran Canaria lo colocará en la vanguardia de los estadios de España, sin duda. La renovación buscará adaptarse a la mayor vanguardia que existe a nivel técnico y también a nivel visual. Las imágenes lo muestran”, indicando que se situará en “el nivel intermedio de los estadios de Primera División”.

Admitió Ricardo Pereira que sí se habían desestimados propuestas modificadoras sobre la estructura del recinto. “Como en cualquier proyecto arquitectónico siempre existen propuestas y alternativas. En este caso la orientación del campo no se podía cambiar: Tiene que ser Norte-Sur. De hecho, también en la propia reunión con la comisión (delegada) nos pidieron que mantuviéramos el nombramiento de las propias gradas en base a este asunto. Estudiamos todas las alternativas para remodelarlo, pero el estadio tiene todas las peticiones constructivas muy claras. Y así las hemos seguido”.

 

Sobre los plazos para la ejecución del proyecto, Pereira confirmó que se establece en “2027. Estamos trabajando a marchas forzadas. Lo vamos a seguir rigurosamente. De cara al Mundial 2030, el plazo es más amplio. Pero nosotros no queremos agotar, sino queremos conocer el estadio reformado mucho antes”.

 

El arquitecto advirtió que no se paralizará la actividad deportiva a causa de las obras, porque “lo normal es que se ejecuten por fases”. Esto no será condicionado por la adjudicación o no a Gran Canaria como sede mundial. “La reforma principal se hará con o sin Mundial”, precisó.