El pequeño caos del Tenerife a balón parado

El balón parado sigue martirizando al Tenerife. Hasta la presente fecha, en las tres primeras jornadas, cuatro de los cinco goles –uno de penalti- han venido a través del marco de la estrategia. Una sangría que supone el 80% de las dianas encajadas. No obstante, durante el pasado curso, el Tenerife de Luis Miguel Ramis sufrió especialmente a través del balón parado y de los centros laterales, siendo las mayores bazas de sus rivales para marcar al segundo equipo menos goleado de la categoría. De los 41 tantos encajados en la 21/22 (entre campeonato regular y playoff), el 34,1% vinieron a través de esta faceta, suponiendo una tercera parte de los balones recogidos por Juan Soriano desde dentro de la red.

 

De esos 14, cabe aclarar que 6 vinieron desde el punto de penalti. Sin embargo, los problemas se acrecentaron a partir de la 29ª jornada, puesta hasta entonces solo dos goles –contra Leganés y Huesca- vinieron desde la pizarra –junto a otros dos desde el punto fatídico-. Desde entonces, la estadística se disparó hacia arriba. Por ejemplo, tres de los cuatro goles del playoff llegaron a balón parado.

 

Goles encajados a balón parado desde la pasada Liga:

Jornada 6: Huesca 1-2 Tenerife

Jornada 7: Almería 3-1 Tenerife (1-0, de penalti).

Jornada 12: Leganés 1-2 Tenerife.

Jornada 20: Tenerife 1-1 Lugo (de penalti).

Jornada 29: Mirandés 2-1 Tenerife (2-1, tras rechace falta directa).

Jornada 30: Tenerife 1-4 Valladolid (dos goles a balón parado).

Jornada 32: Tenerife 0-1 Almería (de penalti).

Jornada 36: Tenerife 3-1 Fuenlabrada (de penalti).

Jornada 41: Éibar 2-0 Tenerife (el segundo, en estrategia).

Jornada 42: Tenerife 1-2 Cartagena (el primero, de penalti).

Vuelta semifinal playoff: Las Palmas 1-2 Tenerife.

Vuelta final playoff: Tenerife 1-3 Girona (de penalti y de estrategia).

 

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