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La UD pone en marcha el ataque relámpago

En 9 segundos generó su primera ocasión en la final frente al Oviedo, final donde subrayó su velocidad ofensiva en los últimos metros de la era García Pimienta

  • EL OTRO PARTIDO
  • 23/05/2022 - 05:44
La UD pone en marcha el ataque relámpago Jesé, tras recibir el agarrón de Cornud, coloca el balón y crea en 9 segundos la primera ocasión de la UD Las Palmas (Movistar/C. Torres)

Manuel Borrego

 

En apenas 9 segundos la UD Las Palmas fue capaz de fabricar su primera jugada de peligro en la final ganada al Real Oviedo. Esa fracción de tiempo fue la que transcurrió desde que el colegiado Ais Reig puso en marcha el partido y el zaguero David Costas abortó la ocasión a pocos centímetros de la portería de Naciente.

 

El ataque relámpago que puso en práctica el equipo amarillo, sin duda jugada diseñada en la pizarra, pasó de puntillas en el partido porque finalmente no tuvo la finalización exitosa que se buscaba. De haberlo hecho, habría tenido una resonancia que ahora trataremos de explicar.

 

Y la primera llamada de atención sobre la jugada es que no es la primera vez que se puso en práctica esta temporada. Esta misma jugada ya se vio en el Nuevo Arcángel de Córdoba, con Las Palmas Atlético en la fecha del debut de Yoni Oujo en su banquillo. La internada fue de Iñaki Elejalde, que por piernas ganó a su par y colocó un balón hacia Pachón desviado por el portero. Esa acción tardó 12 segundos en ejecutarse y también estuvo cerca de convertirse en gol.

 

Si es una elaboración de analistas técnicos, difícilmente se volverá a ver porque ya se encargarán los equipos rivales de tenerla en cuenta. Pero la obra de 9 segundos de los amarillos este pasado sábado fue magnífica, casi perfecta. Se produjo en tres movimientos:

 

1.     Sadiku toca el balón en el círculo central para Jonathan Viera. El albanés corre por el carril central, mientras otros cuatro compañeros también se lanzan en la misma dirección. De derecha a izquierda: Jesé, Kirian, Moleiro y Cardona.

2.     Viera entra en terreno del Oviedo. Avanza unos metros y justo antes de encarar la primera línea azulona coloca el balón en profundidad hacia el área en el sentido de la carrera de Jesé.

 

3.     El tercero en actuar es Jesé. Corría desde el centro del campo cuando Pierre Cornud se percata de que llega como tren de velocidad y pasa por su lado. El defensa galo tarda unas décimas de segundo en reaccionar cuando ya Jesé está frente al balón en el área.

4.     Cornud agarra de la camiseta a Jesé. La infracción se produce en el interior del área oventense, pero Jesé no cesa en su veloz carrera. Y, por fin, envía un pase horizontal buscando un rematador.

 

5.     Sadiku llegó a tiempo, pero eligió mal el destino del remate. El movimiento de Jesé fue perfecto y su pase templado. Sin embargo, el albanés optó por un remate en el segundo poste permitiendo que David Costas, lanzándose a ras de suelo, toque lo justo el balón para que quede en manos de su portero Femenías. Moleiro, que arribó en segunda oleada, también estuvo cerca de haber conectado con el balón.

Con el susto en el cuerpo se reanuda el juego. Pero fue una señal sobre una de las mejoras que viene ofreciendo el equipo amarillo en la recta final de la temporada y que había subrayado el propio Ziganda antes del partido: La velocidad en la ejecución atacante en los tres cuartos finales de cancha. La misma que no pudo contener el equipo asturiano cuando Viera, en el minuto 61, reventó el partido.

 

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