Las derrotas cambian el discurso de Ramis

Luis Miguel Ramis confesó que está «ilusionado» con este Tenerife, que tiene muchos aciertos, pero también errores a pulir. En ese sentido, el míster blanquiazul avisa a la plantilla porque quiere que estén «concentrados los 90 minutos; el partido contra el Almería pudo acabar 5-1». Por otro lado, restó presión ofensiva a Shashoua, exigiendo que otros actores del ataque deben dar un paso adelante. No descarta a Gallego, pero tampoco a Ethyan en el once, donde Apeh se cae por molestias musculares. Y lanzó un mensaje generalizado: «hace unas semanas, todo era un récord histórico. Sinceramente, me importa un pito», rebajando la euforia.

 

Comentó también un aviso a la plantilla: "Los jugadores están tranquilos dentro de la tensión competitiva que requiere a un jugador profesional. Habrá que hacer un nuevo esfuerzo contra un gran rival. Pero veo a los jugadores concentrados y con buenos comportamientos. No creo que haya diferencias competitivas en los dos últimos partidos respecto a los cinco anteriores. Hemos tenido aciertos, pero también fallos que debemos eliminar. El otro día, en una buena lectura del partido contra el Almería, el partido pudo acabar al final 5-1. No puede suceder porque debemos ser estables durante los 90 minutos. Tenemos que ser siempre reconocibles durante los 90 minutos porque ahí es donde podemos competir el partido".

 

"Quiero que la estabilidad de los buenos minutos sean cada vez mayores y nos sintamos más fuertes. Quiero que asimilemos a fuego numerosos conceptos para ser un equipo peligroso, con muchos recursos. En eso estamos. Tenemos que dar el nivel para competir los 90 minutos, sin altibajos ni desorden porque en Segunda División te penaliza porque hay grandes rivales", añadió.

 

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