La sorpresa de doble ariete falso

Manuel Borrego

En las dos recientes victorias ante los líderes de la competición (Espanyol y Mallorca), Pepe Mel introdujo una novedad táctica en el once. Desapareció el ariete de referencia y compartieron la doble función dos delanteros con misiones de llegadas. Rober y Araujo, en este orden, fueron los que firmaron esos tantos victoriosos, que han proporcionado seis puntos en la recta final de la primera vuelta de un alto valor.

Y en ambas jugadas se producen acciones de llegadas de ambos para rematar y sorprender a las defensas de los equipos que se presentaron ante la UD Las Palmas con el rol de menos goleados o de mejores conceptos defensivos. Ambos, al igual que el Almería, tienen una muesca de los amarillos en la clasificación.

Más tarde, cuando el partido en Palma avanzó, quedó en solitario arriba Edu Espiau. Pero los dos arietes falsos habían hecho ya el trabajo. No sólo para acertar en las redes rivales, que es al fin y al cabo el principal cometido. Completaron ese trabajo con la presión a los zagueros en las salidas de balón del Mallorca. Y algunas intercepciones resultaron interesantes.

El tiempo dirá si el nuevo modelo se prolonga en el tiempo. Ayuda a ello a que entre Javi Castellano y Sergio Ruiz se cree también una solvente sociedad en el centro del campo para complicar más las maniobras de los rivales. O si todos los conjuntos adversarios merecerán una atención tan especial como la tuvieron Espanyol y Mallorca.

De cualquier forma, Rober y Araujo (ambos con cinco goles) acabaron en los dos últimos partidos con una sonrisa en el rostro. Y cuando los delanteros son felices ... todo funciona.