Alex Suárez y su papel de actor de reparto

Manuel Borrego

Hay una célebre frase de Tonono Rodríguez, director de formación y captación de la UD Las Palmas, sobre la maduración de los futbolistas de cantera. "No es aconsejable correr más que el tiempo", recuerda.

 

Muchas veces este fundamento de la organización tiene sentido, porque no todos los jugadores evolucionan de igual manera y asimilan adecuadamente sus etapas formativas. En otras, el tiempo no tiene ningún valor. El caso de Pedri González es el más evidente, aunque se conjugan varias circunstancias. Una de ellas es que el jefe deportivo máximo (léase Pepe Mel) tenga ese atrevimiento.

Cada caso es distinto. Hace unos días, la UD Las Palmas recordó en su medio digital el cuadragésimo aniversario del debut de Benito Morales, a los 28 años de edad. Sus circunstancias fueron distintas a las de otros canteranos; una de ellas era la calidad del bloque profesional de su época, que coronó el ciclo con el subcampeonato de Copa. Pero a Benito le dio entonces tiempo de asumir su papel en el equipo desde 1980 y jugar 199 partidos oficiales, con una colección de 40 goles, disfrutar de un ascenso a Primera ...

Ese caso nos recuerda al actual de Alex Suárez, salvando distintas y contenidos contextuales. El recorrido del zaguero hasta ser profesional de la UD Las Palmas ha sido una prueba de fe propia. Ha sido insobornable su ilusión. Hubo un antes y después de Alex Suárez en el Villa de Santa Brígida, cuando una decisión técnica de Israel Quintana le dio un plus en su rendimiento y rol en el equipo. También ocurrió luego en Las Palmas Atlético, siendo decisivo no sólo en el ascenso a Segunda B sino en las campañas notables en la división de bronce. Y también hay un salto evolutivo en él tras el confinamiento. El propio Mel lo subrayó diciendo que "ha dado un paso al frente".

El club está convencido. Acabó la pasada Liga con galones de titular y ha comenzado la nueva en el mismo plano. Pero, además, la sanción de Aythami frente al Fuenlabrada supone que en teoría Alex pase a un escenario que hasta ahora no conocía porque siempre tuvo a su lado en el centro de la defensa a un jugador con más rodaje profesional (el propio Aythami, Mantovani o Mauricio Lemos).

En poco tiempo, Alex se verá con un papel distinto en el equipo. Ya no como actor de reparto, sino como una pieza con mayor protagonismo. Tiene 27 años y, aunque apenas 13 partidos en Segunda División. Pero la sensación es que con él se puede contar. Eric Curbelo, con quien congenió en Las Palmas Atlético, y Tomás Cardona esperan también la decisión de Mel en un partido que es más que una prueba para todos.