Aridai Cabrera y la cantera del otro lado

 

Manuel Borrego

Hubo un tiempo, y no hay que viajar tanto en el calendario, en que los jugadores de formación no tenían en Gran Canaria como prioridad la UD Las Palmas. Era aquella etapa preconcursal, antes de la llegada del nuevo consejo de administración que preside Miguel Angel Ramírez.

En aquellos días la cantera del Universidad y su propio primer equipo tenía mucha presencia en todos los ámbitos de nuestro deporte. Movía más recursos que una arruinada UD Las Palmas, que parecía incluso tener el destino final de otros clubes históricos que no resistieron a sus respectivas crisis económicas y sociales. Porque, también entonces, se miraban espaldas de las ventanas de Pío XII.

En 2020 la Unión Deportiva realiza el anuncio de un fichaje singular: Aridai Cabrera, una joya de la cantera del otro lado, de aquellos tiempos difíciles. Y su incorporación producirá que el entonces vertical y veloz atacante se reúna con otro compañero de aroma canterano en UD Las Palmas pero también con paso formativo en el ahora club desaparecido, Deivid Rodríguez.

El rodeo de Aridai desde hace 13 años para llegar a una entidad que entonces no contemplaba como una plataforma futbolística para su carrera ha sido muy grande. Las Palmas, en esta etapa de resurrección y de estabilidad post-concursal, se ha fijado poco para su primer equipo en aquel Universidad que llegó a situarse por delante en una clasificación de Segunda B, aunque nunca logró arrebatarle el protagonismo histórico que tenía entre los grancanarios. Darino, Jaime Pérez, los retornados portero Javi Ortega y defensa Víctor Afonso, ... Deivid y ahora Aridai fueron jugadores que antes de amarillos fueron azules universitarios.

 

Fue en cambio con jugadores amarillos por donde el Universidad conoció sus días de gloria hasta el momento de la extinción. Con sus colores azules lucieron futbolistas de tanto arraigo en la UD como Alexis Trujillo, Toni Robaina, Socorro, Pedro Vega, Angel Sánchez, David Medina, Francis Santana, los hermanos Francis y Javier Hernández, Javier Campos, Luis Saavedra, Oscar González, Sergio Hernández, Guillermo y Alex Castro, Orlando Quintana, ... hasta el mismo Orlando Suárez y Koldo Sarasúa, que se quedó en la isla haciendo sus pinitos con el club del otro lado.

Los tiempos han cambiado. El Universidad, por desgracia para muchos futbolistas grancanarios, es hoy sólo un recuerdo. Aunque Aridai tiene la oportunidad hasta 2022 de que se vuelvan a recordar los beneficios que otro club en la categoría de bronce podría proporcionar para la siempre acotada cantera de las islas.