La previa

La UD acude a un fiesta donde Osasuna está de resaca

Manuel Borrego

La UD Las Palmas acude a una fiesta. Pero no es la suya. Será el equipo que construya dos hileras para ver pasar a los jugadores del CA Osasuna tres lograr su reciente retorno a la Primera División. La historia se escribe de esta manera aunque la primera intención era otra.

El equipo de Pepe Mel aborda un partido que estaba subrayado en su calendario, pero los desvíos de la temporada lo han llevado a una actuación sin otra trascendencia que el seguir realizando revisión de efectivos y la de tratar de escalar el mayor número posible de posiciones en la clasificación.

Se va a encontrar a un Osasuna de resaca. El propio Jagoba Arrasate ha admitido que le será difícil encajar todo para que su equipo sea el de antes de la pasada semana. Aunque, para ello, siempre encontrará a unas gradas de El Sadar dispuestas a empujar a los rojillos.

Las bajas de Danny Blum y de Peñalba son las novedades más destacadas de los amarillos con respecto a la última semana. Especialmente significada la del extremo germano, que se había recuperado de su lesión pero que en los últimos días ha decidido cambiar de proyecto: del grancanario al germano del Bochum.

Unos que se van y otros que asoman. Es otro encuentro más en el que se brinda la posibilidad de seguir realizando test de comportamiento competitivo a los jugadores del filial.

En esta ocasión no se producirán debuts porque los canteranos que viajan en el grupo ya se han estrenado con Pepe Mel salvo el portero Alvaro Valles.

El partido no tiene cafeína clasificatoria. Pero sí servirá para ir descifrando más detalles de lo que se quiere corregir para 2019-20 o de lo que se quiere prolongar. El bloc de notas del técnico Mel sigue abierto.