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El dato que amenaza la carrera amarilla de Rubén Castro

  • CENTRAL DE DATOS
  • 21/04/2019 - 10:39
El dato que amenaza la carrera amarilla de Rubén Castro Rubén Castro (C. Torres)

B.P.


La deriva que ha tomado la UD Las Palmas es peligrosa. Quedan aún siete encuentros para el final y el equipo de Pepe Mel tiene que cerrar la permanencia cuanto antes.


Y, en este escenario, emergen datos que podrían empañar etapas deportivas de jugadores. Es el más llamativo es el de Rubén Castro. Él mismo, con sus goles, puede evitarlo. Pero el isletero está amenazado de convertirse en el primer jugador en la historia de la UD Las Palmas que dejaría tres descensos en su hoja de servicios. Puede evitarlo, insistimos.


Rubén vivió con amargura los desenlaces de la pérdida de Primera División en 2002 y, más tarde, la caída a Segunda B en 2004. Esa temporada acabó pichichi de la Segunda División A y su destino posterior fue el Deportivo.


Sólo un jugador firma tres descensos con la UD Las Palmas: el central tinerfeño Julio Durán. En 1983 y 1988 estaba en las plantillas de los traspié a Segunda División, mientras en 1992 sufrió la marcha del equipo a Segunda B. Sin embargo, Julio Durán deja un ascenso a Primera (1985) en su camino de amarillo.


Una hilera de futbolistas, desde 1952, tienen más de un descenso con la UD Las Palmas. Y en la mayoría de los casos también dejaron un ascenso. Son casos como los de Pepín, Macario, Villar, Beneyto, en una primera etapa, Luis Saavedra, Manolo López, Mayé, Félix Marrero y Narciso en los años ochenta, además de Cicovic, Alberto, Alex Castro, Paqui y David García más tarde. García estaría en la misma situación de Julio Durán si se cumple la amenaza de 2019.


Con dos descensos y sin premio de ascenso, hasta ahora, están además de Rubén el también isletero Alexs Trujillo, Orlando Quintana, Pedro Vega, Pedro Luis, Oscar, Carlos Ramírez o Verona.


Así que si Rubén quiere evitar una maldición ha de ponerse las pilas con el gol en las siete etapas finales del torneo actual. Porque la Liga sí que tiene mucha chicha aún que quemar ...

 

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