La previa

La victoria, lo único innegociable

Manuel Borrego

Admite Paco Herrera que la UD Las Palmas llega al parido frente al Nástic con hambre de juego y de victorias. Subraya también que el equipo amarillo tiene que expresar en terreno adversario esas mejoras ya exhibidas en casa y que han abierto el ventanal de la esperanza.

Las Palmas ya no tiene tiempo que perder. Porque, además, se ha confirmado la peor noticia para el cazador: un día menos para alcanzar la pieza. Los problemas del Reus son tan abultados que posiblemente la próxima semana se confirmaría su adiós a la Liga dejando en blanco todos los partidos de la segunda vuelta.

No tiene más comodines que ofrecer el equipo amarillo. Su larga ‘ausencia' le obliga a una remontada excepcional, que rondaría los 40 puntos en la segunda vuelta para tener garantías de pelear por el ascenso.

Y los puntos de Tarragona, ante el colista, son innegociables. Para intentar ganarlos, Herrera ya ha avanzado que tiene pocos motivos para cambiar lo realizado hace dos semanas frente al Osasuna. Allí, tras el gol de Fidel, todo comenzó a encajar con mayor coherencia. Las Palmas fue un equipo fiable en defensa y certero en ataque. Esos dos conceptos los habrá de repetir este domingo ante el Nástic.

Pero también ha de tener en cuenta que un rival herido es doblemente peligroso. Y así se lo ha anticipado Enrique Martín a los jugadores amarillos al hablar del encuentro. El entrenador navarro le ha pedido a sus jugadores que echen el resto en casa, porque los puntos en Tarragona son los que evitarían el descenso de categoría.

Una oleada de palabras entre uno y otro bando. Pero ese tiempo ya pasó. Ahora sólo los hechos son los válidos. Y de tres en tres ...