Así viene el partido del Gran Canaria

Duelo de aspirantes al Zamora

Con sus modelos defensivos distintos, Las Palmas y Málaga han logrado restablecer en el inicio de la Liga la fortaleza defensiva que reclamaban sus respectivos técnicos para colocarse en la zona alta de la clasificación

B.P.

El encuentro de este domingo va a colocar frente a frente a dos de los porteros que simbolizan una idea que comparten los técnicos Manolo Jiménez y Juan Ramón López Muñiz: fortaleza defensiva y guardametas aspirantes al Trofeo Zamora.

Uno de los puntos claves de estos equipos en el primer ciclo de cinco encuentros de la Liga ha sido la contundencia defensiva mostrada en esos partidos. Especialmente el Málaga, que ha reducido a un gol su fragilidad en retaguardia.

Y es curioso que el gol de Herrera, para el Lugo, fuera el primero de la Liga apenas 6 minutos del inicio de la competición, en la jornada inaugural. Desde entonces, en los restantes 444 minutos del campeonato el Málaga no ha visto vulnerado sus dominios, que en cuatro encuentros fueron defendidos por el portero internacional marroquí Munir Mohand.

Con estos parciales, es un claro aspirante a ser el menos goleado del campeonato, aunque el amarillo Raúl Fernández no le queda lejos. El Málaga ha logrado terminar cuatro de sus encuentros con la portería a cero.

En Las Palmas la titularidad la ostenta el vasco Raúl Fernandez, que ha disputado al completo los cinco encuentros del vigente campeonato. En total, suma tres goles en contra y ha tenido que intervenir cinco veces más que su colega del Málaga.

Si bien el equipo amarillo está mostrando una variedad ofensiva mayor que los andaluces, lo cierto es que la faceta de retaguardia es también objeto de muchas mejoras. Porque, como dijo desde el primer día Jiménez, la rebaja del número de goles encajados con respecto a las dos temporadas es una de las señales necesarias para comprobar que el equipo ‘progresa adecuadamente'.

En Fernández y Munir queda reflejado ese trabajo que no exclusivo para los guardametas, obviamente. Es una labor de equipo que tanto Las Palmas como Málaga están desarrollando de manera importante en este comienzo del equipo.

El duelo está servido aunque en el partido hay al menos un jugador al que se le caen los goles de los bolsillos. Y viste de amarillo.