Jiménez arma el comando tridente

El técnico andaluz ensaya para encontrar la compatibilidad entre Mir, Araujo y Rubén, en la búsqueda de una cosecha de goles que aproximen a la UD a su candidatura de ascenso

M.B.

Lo ha intentado ya varias veces en el transcurso de los amistosos de la pretemporada. En los planes de Manolo Jiménez alberga la composición de un tridente ofensivo, una arista múltiple que proporcione muchos goles a la UD Las Palmas en el propósito de lograr el ascenso.

Ya hemos expresado que las posibilidades que ofrecen Mir, Araujo y Rubén Castro como atacantes complementarios es muy amplia. Si logra el técnico andaluz formar ese puzzle, conseguiría que el centro de atención de las defensas rivales sea más amplio y que el ataque amarillo pueda ofrecer cualidades diversas en cualquier circunstancia de partido.

El tridente es una composición histórica en el fútbol. La primera condición es tener la posibilidad de armarlo como puede estar intentando la UD Las Palmas. Al margen de otros actores que podrían ingresar en este comando ofensivo, la primera responsabilidad del propio Jiménez es encontrar la mejor versión goleadora de los Mir, Araujo y Castro. Y ya expresó el sábado, tras el partido ante el Marítimo, que el propio técnico se llena de paciencia porque "el gol llegará". No ha ocurrido en los últimos ensayos con estos miembros; conoce no obstante que es cuestión de tiempo.

Rubén ya sabe bien lo que es ser una de las piezas de un tridente que en dos ocasiones dieron el ascenso al Real Betis Balompié. En 2010-11, con Pepe Mel, el ariete grancanario firmó en la Liga regular de segunda 27 tantos, apoyado por su eterno par Jorge Molina (18) y el camerunés Achile Emaná (13).

Rubén volvería a lograrlo en 2014-15, de nuevo con Pepe Mel. La fórmula del tridente volvió a funcionar con un sobresaliente jugador grancanario firmante de 31 tantos. Esa cifra le hizo lograr por segunda vez el pichichi de la Segunda División, que había ganado con la UD Las Palmas en 2003-04. Le acompañó de nuevo en esas funciones Molina (19) y el argentino Renella (7), con menos protagonismo.

Sergio Araujo, en esa nueva posición alejada del fuego defensivo rival, pretende ser el socio más cercano de Rubén. En el ascenso de 2015 con la UD, el Chino fue más un solista con sus 22 goles en la fase regular, de lejos seguido por Momo (7) y Viera (6).

Jiménez ya intentó algo similar en su etapa ateniense con Araujo, aunque quedó más en un dúo con los 11 goles del Chino y los 8 de Livaja para el AEK.

Rafa Mir es el futbolista con más incógnitas de los tres, pero sin duda con un gran potencial y juventud. Hasta ahora no ha participado en el fútbol profesional con tanta arraigo como lo hará esta temporada de amarillo. Aunque dejó rastro la pasada temporada en el filial del Valencia, anotando 15 goles en 18 encuentros antes de ser traspasado al Wolverhampton.

Esas tres lanzas las afina Jiménez. Y en la recámara Sacko, Tana, Fidel, Momo, Erik, Edu, ... esperando esa misma oportunidad.