99-95 en el Gran Canaria Arena

El Granca pone en pie a su hinchada

Los amarillos sufren para batir su mejor registro histórico de victorias consecutivas como local: 13

Juan Pedro Borrego

El Gran Canaria logra su décimo tercera victoria consecutiva como local en la Liga Endesa y bate su mejor registro en este aspecto que había establecido en 12 en marzo de 2009 ante el Real Madrid. La visita de un Estudiantes que venía de víctima estuvo a punto de romper las rachas locales en la competición y sobre los del Magariño a los que se le ha ganado en las 12 últimas visitas. Fue un partido de poder a poder, en el que los anfitriones fueron casi siempre por detrás en el marcador y en el que la tensión defensiva local y el acierto hombres como Seeley, Balvin y Báez decidieron el desenlace.

Empezó el Estudiantes como un Fórmula Uno. Con dos triples de Vicedo se escapó a 0-6. Era la señal de aviso de los de Maldonado. Su tiro exterior iba a ser su amenaza principal (cinco sin fallos para el 11-17), con la que dominaron los primeros compases para sacar de posición a la defensa de Casimiro y obligar a este a un cambio de estrategia removiendo el banquillo con celeridad.

Los madrileños habían llegado al Gran Canaria Arena de tapados. Su posición en la tabla y la última derrota eran engañosas para un equipo que había conseguido dos victorias como visitante en lo que iba de competición y al que le faltaba recuperar el encuentro aplazado de la primera jornada con el Joventut.

Al Gran Canaria, por contra, le costaba defender bien sus circulaciones de balón y enganchar conexiones fructíferas con sus hombres altos. Así, la sensación era impropia para los amarillos, cayendo en el primero de los cuartos con un abultado 26-30 en el que los seis triples visitantes ante lo dos locales tenían mucha influencia.

Necesitaba el Gran Canaria hacer esfuerzos, sobre todo en la zona, para intentar recuperar el mando del partido. La inmadurez de los pívots a veces pasaba factura. Balvin ligeramente acelerado y Pasecniks, tierno en las definiciones, contribuían a dejar crecer a un Estudiantes que luego se encontraba con canastas de rango milagroso para elevar su ventaja (30-36). Apretando los dientes, y a pesar de las ausencias de Eriksson y Aguilar, el Herbalife hizo valer sus rotaciones. Un triple de Rabaseda le dio su segunda ventaja en el choque (43-40), pero aún sin la certeza de tener controlada la situación (43-46) ante un Estudiantes que no precisaba la abusar de su máximo anotador, Landesberg, pero si de un Vicedo desatado (12 puntos, 100% de efectividad) (51-58, al descanso).

El inicio del segundo tiempo fue más de lo mismo. No había forma de que el Gran Canaria engranara su ataque, y el Estudiantes, de la mano de un Omar Cook espléndido en asistencias, se gustaba haciendo canastas de todo tipo para superar por primera vez los 10 puntos de ventaja (61-72). El quinteto principal de los madrileños estaba mostrando ser superior al amarillo y tendría que ser la segunda unidad local quien intentara desnivelar el choque.

Sin embargo, no tuvieron inicialmente esa suerte los Oliver, Pasecniks o Seeley, pese a la prometedora reacción del final del tercer cuarto que le permitió obtener su primera victoria parcial (21-18) para dejar el marcador abierto (72-76), y el prometedor inicio del cuarto final (83-82). Despertó entonces Landesberg y el Estudiantes recuperó oxígeno para llegar a un final angustioso en el que el Herbalife encontró la pequeña senda de la victoria in extremis.

Ficha del partido:

99 Herbalife Gran Canaria (26+25+21+27): Oliver (11), McKissic (4), Paulí (8), Báez (12), Fischer (12) -equipo inicial- Mekel (9), Seeley (20), Balvin (10), Pasecniks (10) y Rabaseda (3).

95 Movistar Estudiantes (30+28+18+19): Cook (7), Vicedo (15), Peña (7), Brown (18), Suton (11) -equipo inicial-, Hakanson (6), Brizuela (11), Landesberg (13), Savané (7) y Caner-Medley.

Árbitros: José Antonio Martin Bertrán, Jacobo Rial y Rafael Serrano

Incidencias: 9ª jornada de la Liga Endesa. Pabellón Gran Canaria Arena.

Seguirá galería de fotos: C. Torres