B.P.

La opinión de Paco Herrera varía en función de las últimas jornadas. "El equipo quiere y tiene otra pinta", afirma el entrenador de los amarillos después del 1-2 en Pamplona. "Estoy contento por el resultado y porque empieza nuestro equipo a mostrar la cara que hemos tenido durante mucho tiempo de la temporada. Lo hemos pasado muy mal al final, pero el equipo ha sabido sufrir. Pero ahora el ganar los tres puntos nos da un valor especial. Estoy satisfecho por el resultado y por el sacrificio y el esfuerzo de los jugadores".

Resaltó Herrera que "el Osasuna es un rival muy intenso. Es un equipo que está en muy buen momento, porque Enrique Martín les ha metido en la competición. Jugar contra ellos es muy complicado para cualquiera. Al final nos estaban atrincherando, teníamos que tapar este agujero. No podíamos poner gente más arriba. Hemos tenido que rectificar situaciones para defender el resultado. Me ha gustado el esfuerzo de todos los jugadores. Eso es lo que me da fuerzas para pensar que todavía se puede producir un milagro".

"Hemos jugado con cambios en la formación titular", comentó. "El sábado próximo también podríamos hacerlo. Todos nuestros jugadores están implicados. Cualquiera que hubiera jugado hoy habría funcionado. Hemos ganado fuera. Era nuestra asignatura. Hemos ido perdiendo valores fuera de casa. En el Gran Canaria éramos fiable. Me da la sensación de que el equipo se ha conjurado por romper la racha. El equipo quiere y tiene otra pinta. ¿Por qué no puede haber un milagro en tres partidos?".

No escatimó méritos a su rival. Así que observó que "en la primera parte tuvimos calma; nos dio mucho Valerón, nos dio sosiego, el balón y Osasuna se vio obligado a correr detrás. Luego ya no podíamos, porque Osasuna fue una avalancha. En todas las disputas nos pasaba por encima. No creo que nos concedieran nada. Nosotros tuvimos balón y calma en la primera parte".