El Yaiza cesa al técnico que le aproximaba a la liguilla

El ex jugador de la UD Las Palmas, Carlos Ramírez, sorprendido por una decisión de la directiva "que no tenía el respaldo del presidente", afirma

M.B.

Sorpresa en Lanzarote. Este jueves, en el cuarto día de la semana, la directiva del Unión Sur Yaiza (Tercera División) comunicó al ex jugador de la UD Las Palmas Carlos Ramírez su desvinculación como entrenador de la entidad. La noticia no dejaría de causar sorpresa si no fuera porque el técnico relevado deja al modesto equipo conejero en sexta posición, a dos puntos de la promoción de ascenso a Segunda B. Ramírez confesaba a Tinta Amarilla que "era una decisión inimaginable" porque el Yaiza, en su tercera campaña en la categoría, le había encomendado la consolidación deportiva mejorando la mejor clasificación histórica del club: noveno, la pasada temporada, también de la mano del que fuera defensa de la UD en los años ochenta e inicios de los noventa.

"Esto es fútbol. Imagino que todo lo que me ha contado el presidente ha de ser verdad", nos relata. En esa conversación de despedida, el titular de la directiva del Yaiza, Vicente Tavío, le comentó que "él me respaldaba pero que otros directivos no lo hacían. Y, en consecuencia, en la última reunión habían decidido mi destitución sin el sí del presidente. ¡Qué quieres que te diga!. Esto es fútbol. El otro argumento que manejan supuestamente los dirigentes es que los jugadores no confiaban en mí. Sin embargo", continúa, "en la reunión que hemos mantenido esta noche se lo he preguntado y ninguno dijo esto".

Las incógnitas que genera una destitución de este calibre, sin un argumento deportivo sólido, son mayores. Contra pronóstico, el Unión Yaiza ha llegado a liderar la clasificación del grupo canario de Tercera y, además, "durante toda la temporada hemos estado entre los cuatro primeras posiciones". La derrota 5-2 frente al Tenisca es el acontecimiento previo al relevo de Carlos Ramírez. "Estamos a dos puntos de la promoción ... El único dolor que me causa toda esta situación es no completar el trabajo con mis jugadores. Es verdad que el objetivo era la permanencia y que estábamos mejorando todo lo que se había realizado la pasada temporada, que fue la primera mía en el equipo. Pero me hacía ilusión llegar a una fase de ascenso con el Yaiza, era un reto por el que estaba ilusionado y en el que creo que todo el entorno tiene esperanzas. Tal y como está las cosas, creo que en las jornadas finales lo íbamos a conseguir porque el equipo sigue dando muy buenas sensaciones en general".

Pero no a todos. "El único problema que he tenido con un jugador (Juanjo) fue que éste indicó hace unas semanas sus dudas en nuestro proyecto. Argumentó que el equipo no jugaba a nada. Comprenderán que si un jugador tiene dudas, desde ese momento no puedo alinearle porque sus dudas no sirven para un equipo. Por eso no le estaba convocando. Pero, como ya digo, me puedo ir de esta manera con la cabeza muy alta. Porque hemos logrado todos los objetivos que nos habían encargado, por encima de las posibilidades de este club que ha estado en la clasificación mejor que otros equipos llamados a ser candidatos. El comportamiento de los jugadores ha sido muy profesional siempre. Les estoy muy agradecidos por su entrega. De ahí que tenga razones para dudar de los argumentos que me han ofrecido".

Se hace cargo del equipo el entrenador del cadete del club, José El Charro, mientras Carlos Ramírez recoge sus cosas. "He dirigido en 68 encuentros al Yaiza y es una destitución que no aún no acabaré de comprender. Le deseo al equipo lo mejor porque la temporada aún está por cerrarse con los encuentros decisivos".