M.B.

Lo que demuestra Paco Herrera con sus comentarios relacionados con el equipo que gestiona a nivel deportivo esta temporada es que le ha puesto sobre una camilla y le ha hecho un estudio profundo, localizando sus virtudes y sus puntos débiles. Hizo referencia en la víspera de la visita al Racing de Santander a la desconfianza que le produce un dato de temporadas anteriores y que pasamos a subrayar:

* Las Palmas ha sido capaz de encadenar una serie de resultados adversos después de un ciclo de victorias.

Ese defecto quiere abortarlo de raíz en su gestión actual, por eso aplica una de las célebres frases de Luis Aragonés para llevarla al vestuario. "El fútbol es ganar; y después de ganar, volver a ganar, ganar, ganar". Quiere el preparador de los amarillos que el virus de la victoria contagie a sus jugadores en cualquier instante y en cualquier escenario.

Las Palmas asiste de esta manera a la cuarta jornada de competición, sin dejar atrás más que el empate firmado en Mallorca. Y no hay motivos para que el equipo sufra alteraciones en su bloque inicial:

* En retaguardia la confianza permanece en el cuarteto de zagueros y Raúl Lizoain. La alternativa ya a la vista es la de Christian Fernández, que llevará al siguiente debate cuando el entrenador tenga que proporcionar una decisión para el lateral diestro.

* En el centro del campo, la ausencia de Momo, por lesión otra vez, es la que obliga a la gran novedad del partido: Asdrúbal o Guzmán. El pacense está también enrachado con el gol,  al haber marcado en los dos partidos oficiales precedentes. Y el grancanario garantiza la pelea y mantener la tensión máxima en su demarcación. Esa es una incógnita que se repite una semana más.

La contundencia defensiva del bloque y la eficacia de un delantero como Sergio Araujo avalan la esperanza grancanaria que, de seguir en este ritmo, pronto podría estar en la cúspide de la clasificación demostrando que el movimiento se demuestra andando.

Enfrente, un rival plagado de lesiones, dudas y tres resultados adversos en el campeonato. Si la UD quiere ser un referente en la categoría, este tipo de escenarios ha de aprovecharlos.