Araujo: un inicio de leyenda

Solo Chili, en Segunda B, ofrece una tarjeta de presentación en la UD Las Palmas similar a la del actual goleador argentino: 4 goles en sus tres primeros encuentros de Liga. El estreno del nuevo 10 entra en la historia del club amarillo

Manuel Borrego

La puesta en escena oficial de Sergio Araujo como jugador de la UD Las Palmas ha sido sensacional: firma 4 goles en tres partidos de Liga. Pero además añade a estos datos la propia LFP un total de seis disparos del argentino, en 250 minutos de juego. Tal exquisitez ante el gol no se conocía en la historia de la UD Las Palmas en el territorio profesional y alumbra un porvenir que aún ha de ratificar en los terrenos de juegos porque la Liga sigue hasta la jornada 42. Todos sus remates han sido con disparos potentes, con ambas piernas; cuatro a las redes y dos a los postes.

La aparición tan determinante de Araujo nos obliga a repasar cómo fueron los estrenos de los principales realizadores de la UD Las Palmas desde su fundación. Y no encuentra parecido sus datos salvo en el caso del delantero cántabro Chili Allende, en la temporada 1995-96 de la Segunda División B, quien también selló cuatro goles en sus tres primeras apariciones en una liga que acabó en ascenso. Pero Chili -que había realizado el primer partido en Copa- los marcó en menos minutos en juego que Araujo: 198. Debutó en la jornada 13 de aquel campeonato, sustituyendo en los minutos finales a Marcelino Díaz, frente al Pontevedra. Y sus cuatro goles, a pares, llegaron en los siguientes partidos frente al Castilla y Deportivo B. El dato de la primera vuelta de Chili fue extraordinario: 8 goles en sus primeros siete partidos. En realidad, era la tercera pieza de un tridente que anotó aquella temporada 62 goles: Eloy (24), Orlando y Chili (19).

El extraño caso de Dani García

Otro jugador de los años noventa que merece mención en estas salidas explosivas de amarillo es el grancanario Dani García. Raro caso el suyo: En sus tres primeros partidos, tres goles (uno al Ferrol y dos al Toledo, ambos fuera de casa). Y fueron actuaciones incompletas de 10 minutos (Ferrol, 1994-95), 8 minutos (Aranjuez, 1995-96) y 80 minutos (Toledo 1996-97) separadas en el tiempo de tres Ligas distintas en dos categorías. Esa trayectoria tan singular no se dio antes y después en la historia del club. Dani no hizo carrera en UD Las Palmas, para seguir posteriormente en Vecindario y Castillo, entre otros. Participó en cinco encuentros con Las Palmas, uno de ellos de Copa.

Lo de Araujo, insistimos, es caso sin referencias entre los artilleros de leyenda de la UD. Algunas refrencias:

Carlos Manuel Morete, que materializó 16 tantos en su primera temporada (1975-76), se estrenó al quinto partido, con dos goles al Zaragoza. Acabó con 9 dianas en la primera vuelta de un total de 16, cerrando un debate inicial en las gradas sobre sus prestaciones tras llegar de River Plate. Otro devorador de las áreas, como el argentino Turu Flores, inició la cuenta en su tercer encuentro de Liga ante el Albacete, para llegar a la decena de goles en la primera vuelta y dejar la cifra en 14.

El máximo realizador absoluto de la entidad, Germán Dévora, se inició en las porterías rivales en su séptima participació contra los profesionales (al Sevilla Atlético). O el primer artillero amarillo en Segunda División, Marcos Márquez, alcanzaría sus primeros cuatro goles tras ocho encuentros con hat trick incluido al Alcorcón.

Entre los datos de aproximación a Araujo figuran 5 goles en 6 primeros partidos en el estreno de Arturo Patiño (1993-94, en Segunda B), 6 tantos en 8 encuentros de Justo Gilberto (1967-68, en Primera) o 3 en 5 partidos de Juan Cedrés (1951-52, en Primera).

"Vengo para marcar muchos goles ... y quedarme para siempre en Las Palmas", dijo el día en que enseñó por primera vez la camiseta que a la espalda ofrecía su nombre junto al dorsal 10. Esa parte del contrato va por el camino correcto.