B.P.

La UD Vecindario está en un nuevo trance problemático. El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol le comunicó este miércoles la exclusión de la competición de su equipo de Tercera. El motivo es el impago de al menos cuatro cuotas -como contempla el reglamento- correspondientes a derechos arbitrales de la vigente temporada. Esta resolución la adopta "por infracción del artículo 80 del Código Disciplinario de la RFEF con las consecuencias que para tal circunstancias ha previsto el artículo 77.2 del propio Código Disciplinario".

Sin embargo, una luz vuelve a iluminar al club de Santa Lucía, porque se acogerá a la presentación de un recurso en las fechas previstas "de diez días de plazo" que le concede la RFEF para apelar ante esta dura resolución.

El artículo incumplido por el Vecindario dice lo siguiente: "El club que, por cuarta vez en una misma temporada, incumpla la oblgación de abonar los honorarios arbitrales, será excluido de la competición con las consecuencias que para tal circunstancia prevé el artículo 77 del presente ordenamiento".

En la notificación oficial, competición precisa que "la UD Vecindario ha incumplido su obligación de abonar los honorarios arbitrales correspondientes a los encuentros del Campeonato Nacional de Liga de Tercera División disputados por el citado club los días 24 de enero del año en curso, 23 de marzo, 6, 12 y 27 de abril, y el pasado 1 de mayo (...) "durante el citado período se ha ido notificando al aludido club las sucesivas sanciones, y dado trámite de alegaciones, todo ello con el apercibimiento de las consecuencias disciplinarias en las que podría incurrir en el caso de reiterarse los incumplimientos de la preceptiva obligación reglamentaria de abono de honorarios arbitrales, sin que por parte de la UD Vecindario se haya obtenido respuesta alguna".

Según fuentes del club consultadas por Tinta Amarilla, la sorpresa se produce porque para alcanzarse esta medida esas comunicaciones internas realizadas por la RFEF para hacer saber al Vecindario de sus incumplimientos y del riesgo que conllevaba el mantenimiento de esta situación no llegaban a destino o, al menos, no eran conocidas por parte de las personas que están agilizando las actividades administrativas del club. En consecuencia, esas advertencias previas no fueron conocidas en el club santaluceño hasta la ejecución de la exclusión.

El Vecindario ha tenido una temporada realmente conflictiva, tratando de salvarse de un descenso administrativo con el esfuerzo de técnicos y jugadores de su plantilla. La primera amenaza fue la no presentación de su partido frente al Cotillo, que le había puesto ya contra las cuerdas para una segunda incomparecencia que, felizmente, no se ha producido. Sin embargo ahora llega el caso de los impagos de las cuotas arbitrales.

De prosperar el recurso que se interpondrá en las próximas horas, así como la solicitud de una suspensión cautelar de la sanción, el Vecindario podrá terminar la temporada en Tercera en la última jornada, con el desplazamiento del equipo a Los Realejos. Y, cuando la Liga termine, a esperar a que la RFEF de marcha atrás en esta medida.