B.P.

"Nuestra meta no es llegar a los Juegos Olímpicos. El objetivo ahora son las medallas", confesaba este martes Onán Barreiros, patrón del equipo grancanario de la clase 470 que en diciembre pasado ganó la trigésimo octava edición de la Christmas Race, junto a su proel Juan Curbelo. Ambos fueron recibidos este martes por el consejero de deportes del Cabildo de Gran Canaria, Lucas Bravo de Laguna, que les deseó un 2014 exitoso, en el que ha sido su primer acto oficial después de la celebración de Reyes. Barreiros-Curbelo inician la nueva temporada saboreando el título nacional de 470 que cosecharon en Palamós.

El dúo de regatistas grancanarios -imagen de la derecha- explicó al máximo representante del deporte de la isla que, por un problema de logística en el desplazamiento del material, no podrán realizar a partir del 25 de enero la Copa del Mundo de la modalidad, que se disputará en Miami, con amplio programa de entrenamientos en aquellas aguas. Pero los planes de preparación no se alteran porque el objetivo marcado es a largo plazo. "Ya he hecho dos campañas de preparación olímpica, en Pekín y en Londres. Ahora trabajamos muy duro no solo para ir a los Juegos, la mentalidad es ir para podium".

Onán está en otra fase deportiva con un nuevo componente del equipo. "Nos hemos adaptado muy rápido, en un solo año los resultados acompañan casi de inmediato. En el pasado Mundial llegamos a ir quintos, aunque tuvimos un problema posterior como consecuencia de un accidente de Juan. No estuvimos físicamente bien al final de la competición y acabamos en el undécimo puesto. Sin embargo, para ser una primera experiencia internacional juntos de este calibre, entiendo que el resultado global fue buenísimo".

"La resolución de mi etapa con Aarón Sarmiento -su acompañante en los últimos certámenes olímpicos- no fue fácil al principio. Más allá de lo deportivo ha perdurado entre nosotros la amistad. Ahora somos rivales y amigos", puntualizó.