
Ben Hansbrough da a los amarillos el toque definitivo para sellar una importante victoria ante el Guipuzkoa Basket
Juan Pedro Borrego
Un parcial 14-0 en seis minutos en la mitad de partido y mucho sufrimiento tuvo que pagar el Herbalife Gran Canaria para terminar 2013 con victoria. Los amarillos se impusieron a un rival directo en la lucha por una plaza en la Copa del Rey, algo que pueden tener casi en el bolsillo a falta de cuatro jornadas para que termine la primera vuelta de la fase regular. El Guipuzkoa dio mucha batalla, como se esperaba, pero no pudo contrarrestar el momento inspirado de Ben Hansbrough, máximo anotador del encuentro en el tramo final del choque.
Fue un partido en el que con pequeñas cosas se hacían grandes avances. Así un triple de Beirán y un par de acciones defensivas ofrecían la sensación de superioridad en un partido de distancias cortas (18-15). El Granca no conseguía consistencia en la zona ni siquiera teniendo momentos con superioridad de centímetros. El conjunto amarillo está padeciendo además una crisis de acierto desde la línea de tiros libres, que le impide manejar con algo más de comodidad los partidos y necesita de movimientos de precisión para conseguir acciones como el segundo triple del partido tras doce intentos, para ponerse por delante en el marcador tímidamente antes de llegar al descanso (28-26).
En el comienzo del tercer cuarto, el panorama cambió muchísimo. Impulsado por los inspirados Hansbrough y Bellas, el herbalife sellaba un parcial 14-0 que había iniciado antes del descanso. Además, comprometió la participación de David Doblas en el partido con la tercera falta del pívot donostiarra. Entonces, con 37-26, llegaba el momento de ver otro encuentro y la presencia de un extrañado O'Leary ejerciendo de falso 'cuatro'.
Las defensas se abrieron y el electrónico empezó a trabajar como merece hacerlo en un partido ACB para ver al Granca con una renta de catorce puntos (45-31) a 3:00 del final del tercer cuarto. El Herbalife había sabido esperar el momento de cocción oportuno para añadir el condimento perfecto a su obra.
Pero ningún buen guiso está terminado hasta que todos ingredientes han alcanzado el sabor adecuado. Faltaba la puntilla, y el Guipuzkoa no iba a permitir que se diera antes de tiempo (46-38 al final del tercer cuarto), quemando muchas de sus naves.
Tocaba esperar, y no perder la paciencia en un partido aún trabado. Un poco de picante, no venía de más, y Hansbrough cumplió con el rol de pimentero, luchando hasta la muerte y pese a la diferencia de tamaño con el 'brutito' Doblas; y encestando una canasta en la contra que sabía a gloria (52-43). El escolta le cogió gusto a su trabajo, y se convirtió en el revulsivo final que necesitaba el Granca para despedir 2013 con una victoria que puede valer una Copa (la del Rey).
63Herbalife Gran Canaria (12+16+18+17): Bellas (6), Hansbrough (14), Newley (13), Báez (12), Martín (2) -equipo inicial-, Oliver (5), Tavares (4), Beirán (7) y O'Leary.
56 Guipuzkoa (15+11+12+18): Salgado (3), Cortaberría, Robinson (12), Ramsdell (10), Doblas (8) -equipo inicial-, Hanley, Winchester (10), Neto (9) y Olaizola (4).
Árbitros: Juan Carlos Arteaga, Sánchez Monserrat y David Soto.
Incidencias: Unas 4.500 personas en el Centro Insular de Deportes. 13ª jornada de la Liga Endesa.