
Por Higinio Medina
Si tuviéramos que describir de forma concisa el partido entre la Unión Deportiva Las Palmas y el Real Jaén (1-0), nos bastaría con el siguiente comentario: "15 minutos brillantes tras un espectacular quiebro de Aranda certificado por gol de Masoud y grandes dosis de veteranía".
Los 3 puntos conseguidos en la tarde de hoy, son 3 puntos para trabajar con algo más de tranquilidad, que no es poco, pues aún queda mucho camino por recorrer para conseguir el nivel óptimo y poder así afrontar con garantías una liga que promete un caudal de emociones.
Si en jornadas anteriores el equipo distaba mucho de ser un "equipo competitivo", con la llegada de los nuevos refuerzos las circunstancias pasan a ser completamente distintas. Es cierto que siguen existiendo carencias que pueden pasar factura, pero también es cierto que hoy se ha contado con el aplomo que da la experiencia, como también es cierto que sería un peligro enorme pasar a depender única y exclusivamente de lo nuevo como argumento.
Dicho esto y dentro de algunos detalles apreciados por la calidad de los mismos, como fueron determinadas jugadas, hubo uno que nos llamó poderosamente la atención y que se repetía tras los ataques del equipo amarillo en la segunda parte, particularmente cuando más incómoda estaba sobre el terreno de juego. Nos referimos a la personalidad de Maosud cuando sus compañeros iban a replegarse. El iraní les indicaba con las manos que se quedaran arriba, que se quedaran para presionar la salida del balón del rival, que no se precipitaran en volver... Esta actitud, reflejo de su experiencia, junto al control que el equipo ejercía tanto del balón como del contrario, no dándole mucho chance, forjaron un triunfo que dejó satisfecho al respetable, que hoy volvía a sonreír...
La maquinaria comienza a engrasarse, el término paciencia se oye hasta la saciedad y contra ello no hay nada que objetar, sobre todo porque entra dentro de la normalidad, lo que no es normal y probablemente es lo que enoje a los seguidores amarillos es la imagen que se había dado anteriormente y eso no es de recibo. Un partido se puede ganar, como se puede perder o empatar, pero siempre con dignidad. No se pide más, bueno sí, sacar lo mejor de la excelente plantilla que ha conformado la Unión Deportiva para esta temporada.