Piedrita

El epílogo de la temporada en Primera de Gran Canaria resultó brillante. Una extraordinaria luchada, de poder a poder, colapsó este jueves Valsequillo, con el terrero a rebosar y pasiones sin control. El encuentro tuvo dos tiempos distintos y tomó la dirección definitiva cuando aparecieron en escena Juan Espino Trota y Yeray Mayor. El líder del Almogarén sumó ocho puntos y certificó en primera persona la victoria de su equipo (18-16). Se quedó, además, a las puertas de arrebatar el título de máximo tumbador, que conserva con 56 adversarios el puntal C del Gáldar, Tino González, sólo dos más que el líder del Almogarén.

Trota enderezó la noche para su escudo cuando el marcador alcanzaba el 5-10. En esos instantes lucía sobremanera el juvenil del Roque Nublo, Fernando Godoy, quitando de brega a cuatro de los principales rivales de la cola valsequillera, compañeros suyos en la selección de Gran Canaria. Los Hernández David, Kevin y Paco, además del capitán Crister Castaño cayeron con él. Sin embargo, en el torneo de las sorpresas recibió la suya a manos de Domingo Barrera, que hizo saltar la primera señal de alarma al equipo del Cruce de Arinaga.

Juan Espino apea de esta manera a Pedro Tejera, en el inicio de la escalada del Almogarén (C. Torres)

Las siguientes fueron obras de Trota, que empezó su serie con Javier Guedes (había firmado también tres puntos), Pedro Tejera e Iván Pérez. El momento culminante de la noche llegó cuando Trota regresó a la arena para salir al encuentro de José Antonio Santana, que parecía entonado. Tras dos minutos y medio de máxima intensidad entre ambos, una pierna atrasada del puntal visitante permitió a Espino el derribo a base de potencia, como había realizado la pasada temporada ante notables oponentes como Cirio Santana y Romen Luis Catire IV. Ese punto resultaría decisivo, porque Santana parecía este jueves el único del Roque Nublo que podría quitar del camino al puntal A. Sus próximas victorias serían Pedro López, Carlos Macías, Jaime González (verdugo de Yeray Mayor) y Quintino, en la última baza.

A Yeray Mayor le queda el honor de hacer el duro trabajo de quitar de brega a cuatro hombres de relieve en el Roque Nublo: Ángel Suárez, Saúl Perera, Arasahi Tejera y Abraham Alonso, por este orden. Mientras que Ayoze Travieso fue el luchador que cercenó la trayectoria del siempre fuera de control Rayco Tejera.

El Almogarén cantó sobre la arena su ranchera de guerra (El Rey), que le había arrebatado en la fase regular el propio Roque Nublo al ganarle en Valsequillo. Aquello no lo olvidaron en el Almogarén y por ello la vendetta fue completa. Sin embargo ambos conjuntos pudieron terminar el ejercicio con un sabor agradable, con la cabeza alta porque dieron una lección de deportividad y un reluciente espectáculo en grandes dosis. Así merece la pena ganar y también perder.

A la derecha, Rayco Tejera tras su eliminación (C. Torres)

Alineaciones:

CL Almogarén:Juan Espino Trota (8), Ayoze Travieso (1), Aridane Ramírez, Yeray Hernández, Yeray Mayor (4), Raúl Mayor, Cristian Sosa, Nauzet Montesdeoca, Ángel Almeida, Crister Castaño (1), David Hernández (2), Kevin Hernández, Paco Hernández, Cristo Aguiar (1), Víctor Vega, Fernando Rodríguez, Nauzet Sánchez y Domingo Barrera (1). Mandador: Julián Bolaños.

Roque Nublo:José Antonio Santana (2), Arasahi Tejera, Ángel Suárez (1), Rayco Tejera (2), Saúl Perera, Juan de Dios Quintino, Jaime González (1), Pedro Tejera, Carlos Macías, Pedro López, Abraham Alonso, Iván Pérez, Fernando Godoy (4), Víctor Sánchez, Bryan Martel (1), Javier Guedes (3), Francisco Cazorla (2) y Carlos Santana. Mandador: Fernando Ramírez.

Arbitros: Manuel Ramos, Francisco Candelaria y Ernesto Díaz. Quedaron en pie Trota y Yeray Hernández

La habilidad de Jaime González para vaciar el intento de Yeray Mayor (C. Torres)