
Sergio Lobera emite su convencimiento del final de la campaña 2012-13 en una charla-coloquio celebrada en Santa María de Guía
Manuel Borrego
Sergio Lobera y su cuerpo técnico (Juan Carlos Socorro, Manuel Sabayera y Zeljko Cicovic) intervinieron este lunes en una amena charla-coloquio en Santa María de Guía, bajo el auspicio de la Peña de la UD Las Palmas Queso Flor de Guía. Unas doscientas personas asistieron al acto en el que el técnico expresó su convencimiento del ascenso del equipo amarillo a la Primera División. Lo hizo de manera sutil, tras recibir una pregunta sobre el futuro de Vitolo: "Vitolo quiere jugar en Primera; por eso no va a querer salir (el año próximo) de Las Palmas".
Lobera se centró en el estado anímico de la plantilla en la recta final de la temporada, donde agota sus opciones para jugar la promoción o hacerse con el segundo puesto de ascenso directo. "Tenemos que instalar el gris en el vestuario. Que los jugadores vivan ajenos al blanco y al negro, a la euforia y a la decepción. Todo lo que se comenta alrededor del equipo les llega y nosotros tenemos que involucrarnos en que no influya en su rendimiento el ambiente que existe en el exterior". Ese blanco y negro lo vive en sus propias carnes: "Cuando ganamos recibo entre 300 a 350 mensajes de felicitación, pero pasa de 50 a 100 cuando no logramos el objetivo en un partido".
A la derecha, Malena Millares antes de presentar la tertulia con Sergio Lobera (C. Torres)
Además de los técnicos mencionados, acudieron a la jornada guiense el presidente Miguel Ángel Ramírez, el vicepresidente del club, Nicolás Ortega, el consejero, Rafael Méndez, el director general de gestión, Patricio Viñayo, junto al director deportivo, Toni Cruz, y el secretario técnico, Branko Milovanovic. Escucharon a Lobera hablar sobre algo "fundamental y que está en boca de todos: el aspecto psicológico de los deportistas. Nosotros comprendemos al jugador como persona, cada uno tiene una vida propia y cada uno disfruta de una vida diferente. El entrenador ha de conocer al jugador como persona", precisó antes de exponer que los objetivos personales del futbolista han de guardar equilibrio "con los del colectivo. El secreto para el correcto rendimiento del futbolista es localizar ese punto de encuentro". Por ello encontró habitual relación entre los máximos realizadores de las categorías con los equipos mejor clasificados o a los porteros menos batidos con aquéllos también. "Los objetivos personales se consiguen con la ayuda del grupo".
NO ENGAÑAR AL FUTBOLISTA
Expresó más tarde su opinión sobre la necesidad de que los equipos tengan sus líderes, extensiones del entrenador en el campo de juego y en momentos en que "nuestra voz no alcanza". Pero subrayó el papel que están teniendo líderes de vestuario que no tienen hueco en sus planteamientos actualmente, destacando la manera de celebrar éstos cada victoria del equipo. "Los jugadores me demuestran cada día que están de acuerdo con mis decisiones. El grupo sabe que es la prioridad sobre el yo. Tenemos un grandísimo vestuario en la Unión Deportiva y profesionales" cuyos comportamientos él admira.
Sin embargo, Lobera confesó que su quizá su éxito como gestor de un colectivo es "afrontar la faceta más importante de un entrenador que es ir de cara, ser sincero, decirle a los jugadores las cosas que no le van a gustar. Hay que decirles la realidad porque ellos la necesitan saber. No podemos engañar al futbolista; eso es un error". El fruto lo recoge en su primer ciclo dentro de la Liga Profesional: "En la Unión Deportiva nadie se desmarca, cada uno sabe su papel y todos los jugadores son conscientes de que este puede ser nuestro año".
A la izquierda, Antonio Aguiar -bloguero de la UD-, los consejeros Rafael Méndez y Nicolás Ortega, y el alcalde de Santa María de Guía, Pedro Rodríguez (C. Torres)
A Lobera se le preguntó de manera individualizada por algunas piezas del equipo. Después de Vitolo, cobró protagonismo el nombre del peruano Andy Pando. "Lo primero que un entrenador busca es el mejor funcionamiento de su equipo. Para tomar decisiones tenemos que poseer la información sobre cómo están todos los jugadores. No quiere ello decir que Pando no lo esté. Pero podríamos transportar el ejemplo a Guerrero, Vicente Gómez, David González ... Tengo un problema: el reglamento es duro conmigo. Sólo me permite que jueguen once y que convoque a dieciocho cada partido. Y tengo problemas no sólo para elegir los once sino para decidir sobre los dieciocho. Pando es un grandísimo jugador pero tiene que esperar su momento, que llegará".
Sobre la situación central en la organización del ataque de Nauzet Alemán lo justificó el técnico aragonés por el criterio de juego que emplea como buen gestor de ocasiones y goles. "Tiene verticalidad y llegada; es ofensivo, posee experiencia, ..." por lo que, dada la confección de la plantilla, le considera el jugador ideal para asumir esta función. "Es un futbolista quizá atípico como mediocentro; pero para nuestros propósitos nos da el ciento por ciento".
El presidente Miguel Ángel Ramírez y el director general de gestión, Patricio Viñayo, a la derecha (C. Torres)
LOS EXTREMOS A PIE CAMBIADO
Habló de Vitolo y Momo como extremos en puestos cambiados. "Vitolo es un jugador con gol. Al estar a 'pierna cambiada' le da mayor posibilidad para la definición que para la asistencia", de ahí que considera un jugador más profundo en su actual ubicación. En el caso de Momo ocurre lo contrario. "Su capacidad de asistencia para nuestros delanteros, en cambio, es mayor jugando por la derecha", al margen de obligar al lateral a tener más amplitud en sus acciones. "Jugar así, en general, nos ha funcionado porque Vitolo ha sido más goleador y Momo ha dado más asistencias". Añadió el nombre de Tato asociándolo a las acciones de Vitolo.
Otro de los nombres propios analizados fue el de Raúl. Dijo Lobera que no tenía criterios objetivos para relevar a Barbosa cuando Lizoain actuó contra el Castilla. "Hoy Raúl es un portero incuestionable; lo tendremos durante muchos años (...) No había motivos para cambiar a Mariano porque estaba bien y recibió las tarjetas por hacer su trabajo de manera correcta. Era lo más oportuno que continuara".
El galo Thievy, cómo no, también estuvo en boca de los asistentes en Guía. "Ahora mismo no podría responder sobre su futuro, porque pertenece a otro club. Si subimos a Primera, él quiere estar aquí", admitió convencido Lobera.
RENOVACIÓN NO FIRMADA
Recibió el entrenador una de las ovaciones de la noche cuando habló sobre su propio futuro, que dio por firmado "con la Unión Deportiva Las Palmas y en Primera División". Se refirió a las palabras del presidente Miguel Ángel Ramírez. "No hay, pues, debate sobre mi continuidad. El club quiere que siga y yo también (...) Estamos en un club modélico", llegó a considera en algunas de sus intervenciones.
Hizo una inmersión en la política de cantera y expuso su modus operandi: "Hay que saber en qué contexto se hace debutar a un jugador de la cantera. No es una cuestión de colgarse medallas para el entrenador. Cuando un futbolista de el paso hemos de hacerlo por convicción de que está en condiciones de asumir ese papel; porque si no es así se crearía un efecto contrario", dijo.