La racha buena del ascenso de 2000 se inició en la jornada 34, con cinco triunfos amarillos consecutivos
Manuel Borrego
No todas las temporadas son semejantes, ni los objetivos se alcanzan con igualdad de puntos. El ascenso directo de 2000 resultó económico: Las Palmas necesitó 72 puntos para acabar como líder; el segundo clasificado (Osasuna), apenas 67, uno más de Villarreal (tercero) y Salamanca (cuarto). A falta de once partidos esta temporada el líder Elche ya posee 67 puntos en sus alforjas, hecho que invita a pensar que tiene a su alcance cifras de leyenda esta temporada.
Pero los proyectos de ascensos, como el actual, se consolidan a base de encadenar victorias, especialmente en la recta final de la competición: suma de tres en tres que, a la postre, es lo que permite avanzar en la clasificación. La UD Las Palmas ha enlazado ahora tres triunfos (Almería, Castilla y Sabadell). Si ésta es la racha buena, como así pretende el equipo, habría que reflexionar algunas variaciones con respecto a aquella que firmó en 2000 Sergio Kresic y que llegó a un estado de máxima euforia a la afición grancanaria. La remontada del técnico hispano croata se firmó a raíz de la jornada 34, enlazando cinco triunfos de manera consecutiva: 1-0 al Lleida, 0-2 al Salamanca, 2-1 al Albacete, 0-2 al Badajoz y 2-0 al Getafe. Esta cupo de cinco de cinco llevó a Las Palmas a las puertas del ascenso, rematado el 21 de mayo de 2000 con la goleada 4-1 al Elche.
Kresic, además, empleó la bala que tenía en recámara. En la semana previa al encuentro frente al Lleida y después de haber empatado con el Logroñés (1-1), protagonizó una célebre rueda de prensa pidiendo el apoyo de la afición, el respaldo mediático al proyecto y que toda la isla echara el resto en pos del ascenso. Así ocurrió, todos a una.
El 'método Lobera' es diferente, sin contar además la remontada hasta la cúspide presenta mayor distancia de puntos. La racha de victorias de esta etapa comenzó cinco jornadas antes que la de Kresic (jornada 29, en el Estadio de los Juegos del Mediterráneo) y el ascenso hasta uno de los puestos de billete directo todavía no se ha culminado.
Siete victorias, la mejor secuencia
Hay que recordar que esa secuencia de cinco triunfos consecutivos de Kresic, a la que hemos hecho mención, ha sido la última de tal calibre que ha firmado la UD Las Palmas en la actual categoría. La mayor de todas se produjo en la campaña 1963-64, con siete triunfos amarillos contra Granada (1-0), Tenerife (1-0), Málaga (0-1), San Fernando (1-2), Algeciras (3-0), Mallorca (2-0) y Abarán (0-3), encuentro en el que de forma matemática -jornada 29- Las Palmas lograba el campeonato de la categoría, el 19 de abril de 1964, a las órdenes de Vicente Dauder. Ese año también hubo ascenso.