Los amarillos logran su décimo triunfo en la temporada ante un Valladolid que sufrió la inspiración de Eulis Báez
T.A.
El Herbalife Gran Canaria tiene Pie y medio en la Copa del Rey. Vitoria puede ir preparando un hueco para los amarillos en la próxima fase final de la competición del KO. El conjunto de Pedro Martínez confirmó en Valladolid ser un visitante aventajado y sumó su décimo triunfo en la Liga Endesea, la sexta en los desplazamientos. Tras un partido enredado, con alternativas en el marcador, los isleños llegaron a un final plácido para imponerse por 73-84 arrebatando a los pucelanos su mejor virtud, el rebote; y contando con un Eulis Báez poderoso que pujó por la mejor valoración individual de la jornada con dobles figuras (18 puntos y 11 rebotes) en un encuentro que suponía el regreso a una de las dos pistas que conoció como local en la ACB.
Fue un choque de toma y daca. El primer cuarto del Gran Canaria fue notable. Toolson fue una pesadilla para la defensa del Valladolid. Ni Tripkovic ni Grimau podían enfriar su muñeca. Con tres triples se fue pronto a los 14 puntos, y el Granca aprovechó su eficacia para irse hasta de 10 puntos en el marcador (13-23).
Pero después de eso, el conjunto amarillo se bloqueó ante un Blancos del Rueda que defendía con mucho atino y atacaba con mayor clarividencia. Ahora sí que los locales había conseguido frenar a Toolson. Así se le dio la vuelta a la tortilla en el marcador, con ventaja local tras un triple de Tripkovic que sellaba un parcial 12-0 ante un completamente desajustado conjunto amarillo (25-23).
El regreso de Nelson a la cancha se produjo cuando el conjunto de Pedro Martínez empezaba a experimentar una cierta mejoría. Aunque el capitán intentaba ofrecer más ventajas en el juego interior para sus compañeros, lo cierto es que la cerrada defensa de los pucelanos impedía desatascar el ataque. De esta manera, al Granca le costaba salir de su minicrisis de juego y el Valladolid aprovechaba, con una mayor fluidez en sus ataques, una victoria parcial 15-13 en el segundo cuarto que le permitía irse al descanso con sólo tres puntos de desventaja (33-36).
La puesta en escena después del paso por los vestuarios fue problemática para el Granca. Valladolid se puso mejor las pilas; y salió inspirado en los dos lados de la cancha. Liderados por un astuto y acertado Jordi Grimau, los locales volvieron a verse ganadores por un instante (41-40), pero fue un suspiro el que le permitió el Herbalife, que ajustó su defensa para frenar la sangría de rebotes para los locales, que ya empezaban a hacer buena su mejor virtud en la competición.
Centrados en los rechaces del tablero, otra vez los amarillos se fueron en el marcador hasta alcanzar la decena de puntos de renta (50-60), que como en la primera parte espabiló el instinto ganador de los pucelanos en un encuentro que se había animado ofensivamente de forma descarada para ambos equipos.
Pero en esta ocasión, el Granca no estaba dispuesto a tropezar en la misma piedra. Mantuvo el tipo ante el acoso local y llegó al último cuarto con una renta de nueve puntos (55-64), después de ganar el tercero por 22-28. Los amarillos, con Bellas en la dirección y Báez representando a su mejor versión, supieron tener criterio de juego para incluso incrementar su renta hasta los 13 puntos (57-70). Con el partido encendido por parte de la afición local, una vez más, el Gran Canaria vuelve a demostrar que sabe moverse como pez en el agua. Superando el nuevo arreón local con un parcial 6-0, Báez mantuvo la entereza en los tiros libres y tras recuperar un balón asistió en la contra a Newley que devolvió los dos dígitos en la diferencia entre los marcadores (66-76), para estirarla hasta los 16 ante un roto equipo anfitrión (66-82) y disfrutar de un paseo triunfal en el final del choque.
Ficha del partido:
73 Blancos de Rueda Valladolid (18+15+22+16): Renfroe (13), Tripkovic (10), O'Leary (9), Martín (9), Hunter (20) -equipo inicial-, Grimau (10), Cizauskas, Sinanovic (2) y Mohamed.
84 Herbalife Gran Canaria (23+13+28+20): Bellas (6), Toolson (18), Newley (13), Nelson (6), Slokar (2) -equipo inicial-, Guerra, Báez (18), Rey (10), Scheyer (7) y Beirán (4).
Árbitros: García González, Peruga y Planells.
Incidencias: Pabellón del Pisuerga. 4.100 espectadores. 14ª jornada de la Liga Endesa.