Fotos: C. Torres
La sociedad Néstor-Asdrúbal funcionó este domingo con el filial. El 2-0 al Vera es obra donde se conjuga la autoestima de los futbolistas y su buen gusto por lo estético. Así fue.
UN CAÑO.
Combinaba Las Palmas Atlético en las proximidades del área del Vera. Néstor Gordillo está tapado por varios defensores visitantes pero opta por dar un pase profundo hacia su compañero Asdrúbal, que reclama el balón. Elige un caño entre las piernas del central Donato.
UNA PARED.
Asdrúbal observa la salida del portero Joshua y, sin mirar, opta por devolver el balón al primer contacto al punto de origen, con una pared. Néstor intuye las intenciones de su compañero y, de igual forma, inicia la carrera hacia el espacio libre.
Y UN TACONAZO.
El partido va camino de la sentencia. La defensa del Vera reacciona con prontitud para tapar cualquier remate de Néstor, ya en el área. Pero el diez del filial tenía una última sorpresa. También sin retener el cuero, utiliza el tacón para un remate inesperado que acaba en las redes del conjunto tinerfeño tras pasar entre defensores y portero. Un gran gol para la reacción del líder, que vuelve a ganar después de tres jornadas.