Deivid comienza a vivir su particular derbi hispalense en la ronda copera de octavos de final
M.B.
Deivid ya vive su particular derbi hispalense, porque "los sevillistas me dan caña para que eliminemos al Betis. Desde el día del sorteo me están llamando ... tengo muchas ganas de jugar esa eliminatoria, pero antes nos toca pensar en el Huesca, que es más importante ahora mismo". El partido de ida de octavos de final (jueves 13 de diciembre, 21.00 horas) marcará las próximas fechas con un delantero grancanario, Rubén Castro, que "está como siempre: marcando. El año pasado estuvo a punto de ir a la Eurocopa. Tenemos que estar muy atentos a sus movimientos, aunque es verdad que el Betis tiene muchos jugadores peligrosos delante, no sólo él. El Betis no es sólo Rubén. Será una eliminatoria muy complicada contra uno de los buenos equipos de Primera División".
Aclaró que en El Molinón "estaba mareado, me llevé un codazo o cabezazo. Estuve en el suelo donde los aficionados del Sporting me dijeron de todo; pero tenía que volver al campo porque me estoy encontrando muy bien. Me recuperé en el descanso para seguir en el partido", dijo sobre el golpe que recibió en la primera parte y que le hizo ser atendido en la banda con los fisioteperautas del club.
"Estamos con números de liguilla; ese es el camino desde luego. Tenemos que seguir así", precisó sobre el dulce momento de su equipo.