El consejo de administración de la UD califica como vergonzosa la actuación de algunos jugadores que "no están a la altura de ese escudo"
"Hay jugadores que no hacen honor ni al sueldo que se les paga, ni a la camiseta de la UD Las Palmas y que no van a continuar", dijo Miguel Ángel Ramírez, "cabreado" a la conclusión del partido de este viernes frente al Cartagena. El titular del consejo de administración aseguró que había sentido vergüenza por la actuación del equipo y que comprendía el malhumor de los aficionados. No dio nombres pero aseguró que "hay jugadores que se irán del club, aunque tengan contrato en vigor. Ya lo anunciaremos cuando sea oportuno, pero en el consejo estimamos conveniente que no deben continuar".
"Lo que no vamos a consentir es que volvamos a dar esta imagen", en alusión al partido contra el Cartagena. "Hemos tenido temporadas duras en nuestra entidad, pero nunca he pasado tanta vergüenza como cuando perdimos ante el Huesca y como en esta ocasión. Se puede perder un partido pero hay que estar a la altura del escudo y de la historia de este club. Muchos no lo hacen", apuntó el presidente.
Ramírez pidió perdón a los aficionados en nombre de su consejo. "Hay jugadores que observan que la UD Las Palmas está virtualmente salvada y sus cabezas están en otros campos o en otros equipos. Por eso estoy muy enojado porque nuestra afición no se merece este espectáculo".
"Con la imagen que estamos dando, con un partido televisado, poco se puede pedir a la afición. A lo mejor seis mil fueron muchos", precisó el presidente que dijo "necesito ir cuanto antes a la cama para olvidar esto".
"Generalizar siempre es injusto. Pero sin señalar a nadie tengo claro que hay jugadores que el año que viene no tienen que estar en la UD Las Palmas. No están dando lo que tienen que dar por este club. Hemos podido ver las actitudes de los jugadores de la UD Las Palmas y del Cartagena, que creyó en la victoria porque se lo ha posibilitado la actitud de los jugadores de la UD Las Palmas", aclara.
"No nos merecemos este final; ni aficionados, dirigentes o las personas que estamos en el entorno de la UD Las Palmas. Habíamos realizado una temporada que invitaba a metas mayores. Se ha diluido como un azucarillo. Hasta ahí lo podríamos aceptar pero no la bajada de brazos", prosiguió el presidente que no bajó el tono de su enfado. "La UD Las Palmas no saldrá el próximo sábado a dar la misma imagen de hoy. Que el entrenador tome las medidas que tenga que tomar".