Sergio Kresic, el entrenador del último ascenso a la Primera División de la UD Las Palmas, nos traslada una opinión personal en relación a unas manifestaciones realizadas hace unas fechas por el presidente de honor de la UD Las Palmas, Germán Dévora, quien en una tertulia organizada por los alumnos de Producción Audiovisual del Instituto Politécnico de la capital grancanaria abogó por que el Estadio Insular sea objeto de una reforma y que en él jueguen sus encuentros oficiales los juveniles de la UD Las Palmas. "Perdimos una oportunidad y por ello siento envidia sana de Tenerife con el Heliodoro. Con muchísimo menos dinero que el invertido en el nuevo estadio se habría remozado el Insular", argumentó.

Kresic añade a las palabras de Germán la siguiente valoración, que realiza a través de Tinta Amarilla.es: "El Estadio Insular tenía magia. Los jugadores, al tener respaldo de la afición tan cercana, sacaban en los pulmones o las piernas más de sí mismos y lo que no tenían. La Unión Deportiva Las Palmas necesita recuperar el ambiente de su antiguo estadio si quiere volver a competir con los más grandes. Entrenar los niños en un ambiente de calor, como lo ha tenido el Insular, enseña y agranda el amor hacia su propio club ... Sí, sí, estamos en otra época", prosigue el técnico hispano-croata, "pero la clave está en la educación. Educar a querer su tierra, respetando a los demás, nos hace más grandes y más fuertes, seguros en sí mismo, para poder competir con cualquier, sobre todo si tenemos talento y a esto hay que añadir trabajo".