La mejor clasificación histórica del club en la fase regular, la despedida de Moran y la derrota más abultada como local marcan los últimos 365 días
2011 fue un año de luces y sombras para el Gran Canaria 2014. El conjunto amarillo ha vivido sinsabores que han dejado momentos para el grato recuerdo y otros que siembran una desazón notable entre sus aficionados. Los presupuestos siguen cursando a la baja. Pero el equipo deja el año con más victorias que derrotas en las competiciones oficiales. El fin de la era Jim Moran marca una clara franja fronteriza entre el antiguo y el nuevo Gran Canaria.
Hay dos Granca en el 2011 que ahora despedimos. El de antes y el de después del verano. La franja de la era estival marca dos eras bien diferenciadas del club tanto en la parcela administrativa como deportiva. Aunque en enero se empieza la competición oficial con la derrota en el Pabellón Pisuerga (70-73), los amarillos son capaces de remontar el vuelo y meter su nombre en la Copa del Rey que se celebraría en Madrid. Dos días después de ese varapalo, el conjunto de Pedro Martínez sellaba su clasificación para la fase Last-16 de la Eurocopa con un triunfo en casa ante el Buducnost (62-60), y se despedía del certamen continental dos meses más tarde en esta ronda.
En medio de ella, el Real Madrid cumplía con el pronóstico de la eliminatoria copera (78-72). La séptima participación isleña en esta cita no corría mejor suerte que las seis anteriores. Más tarde, el Gran Canaria, que había terminado en su mejor clasificación histórica en la fase regular, quinto, disputó el play off con el Caja Laboral. Se lo puso complicado al equipo de Ivanovic en el primer encuentro (86-82); y no fue tan fiero en el segundo (76-93). En el encuentro de Vitoria, Mirza Teletovic fue la pesadilla amarilla con 27 puntos, y en el de Gran Canaria, Brad Oleson tomaba el testigo con 21. Ese último partido tuvo matices de despedida. Carroll tenía claro que se iba. Jim Moran, casi se lo olía; y Savané sospechaba que podía ser su última temporada en el conjunto isleño.
El verano deparó la revolución en la plantilla. Jim Moran, que había superado en el número de triples a su amigo Jason Klein, no veía renovada la confianza del club en él tras una década vestido de amarillo. Llegaban nuevos fichajes, bajo un proyecto marcado por la austeridad en los gastos. Mientras, Carroll viajaba a Madrid y Wallace a Barcelona. Fueron dos varapalos complicados de digerir, junto a la pérdida de señas de identidad como Moran, un cambio en la cúpula directiva del club, Joaquín Costa tomaba el testigo que dejaba Agustín Medina.
Victorias | Derrotas | Totales | |
Liga'12 | 5 | 8 | 13 |
Liga'11 | 14 | 7 | 21 |
Play off | 0 | 2 | 2 |
Copa | 0 | 1 | 1 |
Europeos | 9 | 6 | 16 |
Totales | 28 | 24 | 52 |
Carroll había repetido como máximo anotador de la competición por segundo año consecutivo y vestido de amarillo. Para la actual plantilla suponía un reto. Aún así, lleva 11 victorias y 10 derrotas en partidos oficiales, por los 17 y 14 que dejaron sus antecesores antes del verano en las cuentas de un año que terminó con un balance de 28 triunfos y 24 partidos perdidos en las cuatro competiciones en las que tomó parte el Gran Canaria. Con el nuevo curso ya en marcha, se cumplen los 100 partidos del club en Europa.
Entre los datos estadísticos que deja el año, el Gran Canaria igualó el número de victorias consecutivas en la competición liguera, 7, entre las jornadas 28ª y 34ª en las que terminó un ejemplar remontada desde la plaza novena a la quinta. Pero se produjo el peor final del año previsible. En Centro Insular de Deportes padeció la derrota más abultada en la historia del club como local en la máxima categoría (45-78), así como la aportación ofensiva más baja de los amarillos en esta competición. Los 33 puntos en contra en el partido ante el Lagun Aro Guipuzcoa extienden una nube de dudas sobre la cabeza de los amarillos. El inicio de 2012 deberá encargarse de diluirla.
Juan Pedro Borrego