
El colegiado López Acera señaló en contra de los intereses de la UD Las Palmas un penalti poco habitual precisamente por lo habitual o abundante que suelen serlas acciones de contacto en cada partido. Las cámaras de TV descubrieron el motivo por el que el auxiliar del árbitro extremeño decidió paralizar el partido y condenar a la UD al castigo máximo en un encuentro que, pese a la inferioridad numérica, parecía controlado. Las imágenes delatan el agarrón de Mauro Quiroga -estrangulamiento de judo- a Maldonado en una zona ajena a donde se desarrollaba el teórico peligro del Cartagena, tras el saque de un corner. "No sé lo que pasó, hubo un forcejeo, tengo que ver las imágenes", argumentó el delantero argentino al finalizar el partido.
Lo que hizo Quiroga conlleva un castigo desde los once metros, sin duda. Enganchó con su brazo el cuello del jugador rival, impidiéndole actuar en una ocasión a la que no tenía Maldonado opciones de llegar. Es por ello incomprensible el altísimo riesgo que Quiroga asumió, haciendo peligrar con ello el desenlace final del encuentro en contra de los intereses canarios.
La escena posterior demostró que la decisión del colegiado y su asistente había elevado la indignación de los jugadores canarios. Incluso el propio Quiroga estaba en el pelotón de futbolistas amarillos protestantes. Se escapaba el partido, los puntos, pero estaba Barbosa para resolver el desaguisado que se había organizado en un instante.
No fue el único quebradero de cabeza para Juan Manuel Rodríguez, por más que dijera aquello de que "el arbitraje es más de lo mismo", en alusión a lo ocurrido esta temporada. Posiblemente el entrenador podrá tener razón en el fondo del contenido, porque decisiones erróneas se han producido esta campaña en abundancia contra los intereses canarios. Pero más que la propia decisión del colegiado, al técnico amarillo le preocupará la falta de control de varios de sus jugadores en situaciones límites. Javi Guerrero se jugó la segunda amonestaciones en un forcejeo en el centro del campo. Demasiado factor-riesgo para tan irrelevante jugada. Y Francis Suárez perdió el control cuando ya estaba en el banquillo donde ha cercenado la posibilidad de seguir en el once titular frente al Deportivo a causa de su tarjeta roja directa.
NUEVE EXPULSIONES EN 17 PARTIDOS
La UD Las Palmas ha vuelto a unir un eslabón más en la cadena de despropósitos de cada partido. Para un entrenador será complicado desarrollo un partido con tal cantidad de contratiempos, sin contar los refereridos a las lesiones de los futbolistas. En total, con las dos tarjetas rojas de Cartagona, Las Palmas suma esta temporada nueve expulsiones de sus jugadores. Se contabilizan las siguientes:
Sergio, jornada 2, doble amonestación en el minuto 27
Herner, jornada 3, roja directa en el minuto 17
Vicente Gómez, jornada 6, doble amonestaciones en el minuto 65
De nuevo Herner, jornada 6, roja directa en el minuto 50
Juanpe, jornada 7, doble amonestación en el minuto 76
Javi Guerrero, jornada 13, roja directa en el minuto 88
Barbosa, jornada 15, roja directa en el minuto 36
De nuevo Guerrero, jornada 17, doble cartulina amarilla en el minuto 57
Francis, jornada 17, roja directa en el minuto 75 cuando ya había sido relevado