La UD Las Palmas regresa de Girona malhumorada, con la segunda derrota consecutiva y las secuelas que dejarán las expulsiones de Herner, Vicente Gómez y Juan Manuel Rodríguez
Las Palmas encadenó su segunda derrota consecutiva, al caer en Girona (4-2) en un encuentro que queda caracterizado porque el equipo grancanario lo finalizó con nueve jugadores y por la remontada del conjunto catalán tras el 0-2. Fue un partido con una trayectoria extraña puesto que los amarillos respondieron al dominio inicial del cuadro catalán con dos tantos en jugadas de ensayo, con una precisión exquisita en las primeras llegadas al área de Santamaría. Vicente Gómez, entonces convertido en el enlace de Javi Guerrero, materializó sus dos primeros tantos en la Liga (antes había marcado en la Copa del Rey, frente al Valladolid) y había fraguado una ventaja sustancial que hizo concebir esperanzas para una nueva victoria a domicilio de los amarillos. Todo parecía tranquilo hasta que llegó el 1-2, obra de Coro. En el barullo fue expulsado Juan Manuel Rodríguez, que reclamaba una acción de fuera de juego en el tanto catalán.
Pero Las Palmas desapareció de la escena en la segunda parte, acusando en su estructura la inferioridad numérica. Primero se produjo la expulsión de Herner, al cometer falta como último defensor, y después la segunda amonestación de Vicente Gómez. El jugador argentino manifestó tras el encuentro que antes de su falta había recibido una de un contrario que el árbitro había obviado, mientras Juan Manuel de nuevo discutió la autenticidad de la segunda cartulina del centrocampista grancanario Gómez, cuya salida a vestuarios dejó al equipo contra las cuerdas aún con el partido 2-2.
El Girona aprovechó la ocasión y anotó los tantos de una goleada que dejan a Las Palmas en receso clasificatorio y tocada en la zona defensiva y centro del campo antes del encuentro contra el Murcia, dentro de una semana.